Se percibe ya la época festiva de Navidad 2025 en vías, explanadas y zonas de compras del mundo.
Diversas naciones han dado ya la bienvenida a este periodo encantador, donde el brillo, costumbres y ritos que combinan recuerdo, ecología y función visual son el centro de atención.
A continuación, detallamos cómo se ha recibido esta etapa memorable:
El pino navideño predilecto de Nueva York ya arribó al Rockefeller Center para su adorno el 3 de diciembre venidero.
El abeto de Noruega, con sus 23 metros de altura, 14 metros de ancho y 11 toneladas de peso.
El árbol de seis दशकों será engalanado con más de 50 000 bombillas LED de varios colores y alrededor de ocho kilómetros de cableado; en su cúspide lucirá la estrella Swarovski de 2,7 metros y 400 kilogramos cubierta por 3 millones de piezas de cristal, y permanecerá iluminado hasta mediados de enero.
En Europa, los típicos mercadillos navideños han reabierto sus puertas entre finales de noviembre y diciembre.
Localidades como Estrasburgo, Viena, Basilea y Colmar exhiben plazas repletas de puestos de manufactura, árboles colosales y pistas de patinaje; varios mercados conservan la tradición de arrancar con actuaciones musicales y eventos callejeros que atraen tanto a residentes como a visitantes.
Las “iluminaciones” de Tokio —espectáculos lumínicos que cubren arterias viales, centros comerciales y jardines— se extienden desde noviembre hasta enero, e incluyen este año montajes a gran escala como la “Mega Iluminación” en Shinagawa y recorridos de luz que transforman las noches en escenarios de fantasía.
Núcleos familiares y parejas disfrutan de estos paisajes para paseos vespertinos y capturas fotográficas.
Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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