Nevada.- Un lamentable suceso de violencia vial cobró la vida de un niño de 11 años en una carretera de Las Vegas, después de que una disputa entre conductores culminara en un disparo mortal. Las recientes grabaciones difundidas desde la cámara corporal de un agente revelan el momento en que Valente Ayala, padrastro del menor, exclama con angustia: “¡Mi niño ha fallecido!”, instante antes de desplomarse en medio de la vía.
El video, divulgado por el Departamento de Policía Metropolitana de Las Vegas, capturó a Ayala fuera de sí mientras informaba a un oficial que su hijastro, Brandon Domínguez, yacía sin vida en el asiento trasero de su automóvil, a consecuencia de un altercado ocurrido la mañana del 15 de noviembre en la Interestatal 215, cerca de Henderson.
Ayala se dirigía a dejar al pequeño en la escuela cerca de las 7:30 de la mañana cuando él y Tyler Matthew Johns, de 22 años, iniciaron una competencia hostil por un carril entre el denso tráfico, según el informe policial.
Mientras el padrastro gritaba en estado de shock, las imágenes muestran a Johns acercándose con parsimonia al oficial, colocando sus manos tras la espalda y rindiéndose de forma espontánea. “Yo le disparé, colega”, confesó el joven, visiblemente arrepentido, antes de admitir que ambos conductores se vieron envueltos en un incidente de furia al volante y que el homicidio era “enteramente mi responsabilidad”. “No sabía que había un niño detrás y lo maté”, agregó.
Según la policía de Henderson, antes del disparo, los dos vehículos se adelantaron mutuamente y los choferes bajaron las ventanillas para increparse verbalmente. Fue entonces cuando Johns habría sacado un arma y arremetido a tiros contra la camioneta de Ayala. Tras el ataque, el padrastro impactó el sedán del presunto agresor, forzando a ambos a detenerse en la autopista, donde se enfrentaron físicamente otra vez.
Un agente de Las Vegas que patrullaba la zona intervino para detener la confrontación y detuvo a Johns, quien posteriormente fue imputado por homicidio y por efectuar disparos contra un vehículo. Brandon fue declarado fallecido en el sitio.
La familia del menor inició una colecta en GoFundMe que ha reunido cerca de 38 mil 400 dólares. En un comunicado, sus padres describieron al niño como “la luz de nuestra familia”, un pequeño lleno de alegría, afectuoso y con un carácter juguetón que iluminaba cada lugar al que iba.
“Brandon no era solamente un hijo adorado; era verdaderamente excepcional”, escribieron. “Tenía un ánimo capaz de provocar sonrisas en cualquiera y un corazón rebosante de genuina felicidad”.
Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.














Agregar Comentario