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Washington, D.C. — El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, otra vez crispó la relación con la prensa al amenazar con retirar la potestad de emisión a la cadena ABC, después de mostrarse notablemente molesto por las preguntas de una periodista relativas a los negocios de su parentela en Arabia Saudita y por el reciente escándalo atinente al caso Jeffrey Epstein.
“¿Resulta adecuado que sus parientes negocien en Arabia Saudita mientras usted ostenta la presidencia? ¿Esto constituye un conflicto de intereses?”, inquirió Bruce, según reportó la agencia AFP.
La informadora también se dirigió al príncipe saudí, recordando que las agencias de inteligencia estadounidenses le achacaron la responsabilidad en el homicidio del periodista Jamal Khashoggi en 2018. Agregó, además, que deudos de las víctimas del 11-S expresaron su descontento por su presencia en la Casa Blanca.
Las indagatorias se produjeron un día luego de que Dar Global, constructora saudí, anunciara un nuevo acuerdo en Maldivas con la Organización Trump, administrada desde 2016 por los vástagos del mandatario, Donald Junior y Eric Trump.
Si bien Trump sostiene haberse desvinculado de la dirección empresarial, conserva participación accionaria vía un fideicomiso.
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Ante las imputaciones, Trump interrumpió a Bruce y descalificó a la cadena: “ABC, patrañas informativas. Una de las peores en este campo”. También negó cualquier choque de intereses: “Yo no tengo nada que ver con los asuntos mercantiles de mi parentela. Me aparté de eso”.
El jefe de Estado fue más lejos al sugerir que la cadena debería perder su permiso de difusión. “Considero que se le debería anular la licencia a ABC, pues su información es falsa e inexacta”, sentenció.
El incidente se suma a otra polémica que involucró al presidente días atrás. El viernes previo, Trump tildó de “lechoncita” a Catherine Lucey, corresponsal de Bloomberg, cuando esta le cuestionó sobre la desclasificación de papeles ligados a Jeffrey Epstein.
Según la agencia EFE, el suceso ocurrió a bordo del avión presidencial. Cuando la reportera preguntó por qué Trump rehuía confirmar si los archivos no contenían “algo comprometedor”, el mandatario contestó: “Silencio. Cállate, cerdita”, señalándola con el dedo.
La expresión, que se hizo viral en redes sociales este martes, suscitó críticas en el gremio de comunicadores. Jake Tapper, conductor de CNN, catalogó la respuesta del mandatario como “asqueroso y totalmente inadmisible”. Por su parte, Gretchen Carlson, exfigura de Fox News, la calificó de “repugnante y denigrante”.
Las recientes controversias ahondan el ya complicado historial de Trump con los medios de comunicación, caracterizado por denuestos, ataques personales y cuestionamientos a la fiabilidad de medios informativos. Las advertencias sobre quitar la licencia de emisión a un canal nacional han reactivado la discusión sobre la libertad de prensa y los límites del poder presidencial en suelo estadounidense.
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