De acuerdo con Rizik, esto potencia el resguardo de los usuarios, minimiza la posibilidad de engaños y optimiza la agilidad en los puestos de cobro
A partir de este martes, quienes utilizan Paso Rápido ya no tendrán que indicar o escribir el número de su TAG de forma manual en las estaciones de peaje, según comunicó Hostos Rizik, gerente ejecutivo del Fideicomiso RD Vial.
Detalló que han colocado nuevos equipos lectores RFID de apoyo en toda la red, los cuales facilitan la confirmación del tránsito del vehículo incluso si el TAG falla al cruzar por los carriles designados.
Desde hace cierto tiempo, los conductores que usan los carriles de paso rápido han reportado diversas complicaciones, tales como lecturas erróneas del dispositivo (el sello electrónico), cobros equivocados o cobros repetidos, entre otros inconvenientes.
La adopción de esta avanzada tecnología, según Rizik, incrementa la seguridad para los usuarios, disminuye la incidencia de prácticas fraudulentas y agiliza el tránsito en los puntos de pago, marcando un progreso notorio en la actualización del sistema de carreteras del país.
“Desde este día, es innecesario compartir el código de su TAG de Paso Rápido; se suprime la tecleo manual en el sistema de peajes. @RD_VIAL ha instalado lectores RFID adicionales para respaldo, los cuales permiten confirmar el paso si su TAG falla al ser leído en los carriles exclusivos. Esto resguarda a los usuarios, previene fraudes y mejora el flujo en los peajes. Continuamos modernizando la infraestructura vial nacional” manifestó el directivo en sus plataformas digitales.
¿Qué es el paso rápido?: RD-Vial lo describe como un aparato electrónico que incluye una antena, la cual interactúa con el equipo instalado en las casetas de peaje para comprobar su saldo y autorizar el paso vehicular.
Por su parte, el lector RFID, conforme a información disponible públicamente, es un aparato que emplea ondas radiales para leer y registrar información en distintivos de radiofrecuencia sin contacto físico. El lector capta la señal, descifra los datos guardados y los transmite para su posterior análisis. Estos lectores pueden estar fijos o ser portátiles y son empleados para la identificación automática de ítems, como en la gestión de existencias y el manejo de acceso.
Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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