Los centros de votación cerraron el domingo en Chile y las autoridades electorales comenzaron el conteo de votos de la segunda vuelta presidencial, en la que se enfrentan la comunista Jeannette Jara y el ultraderechista José Antonio Kast.
Kast, fundador del Partido Republicano y favorito en las encuestas, ha prometido un “gobierno de emergencia” para combatir el crimen organizado, mientras que Jara busca dar continuidad al proyecto del saliente gobierno del izquierdista Gabriel Boric, en el que fue ministra del Trabajo.
Según el Servicio Electoral, los resultados de la contienda se darán a conocer la noche de este mismo domingo.
Unos 15,7 millones de electores estaban convocados a sufragar en esta segunda vuelta, en la que el voto es completamente obligatorio y se aplicarán sanciones a quienes no participen.
Los dos candidatos en contienda
Jara fue la primera comunista en encabezar una lista única que unificó a todos los sectores de la izquierda y centroizquierda chilenas. Kast, quien se postuló por tercera vez a La Moneda, conquistó la simpatía del electorado con su promesa de instaurar un gobierno de tolerancia cero frente al crimen organizado y la inmigración irregular, que son las dos mayores preocupaciones de los chilenos.
Hace cuatro años, Kast estuvo cerca de alcanzar la presidencia, pero fue derrotado en el balotaje por Boric, debido a que sus posturas, consideradas por muchos como extremas —como su oposición al matrimonio igualitario, al aborto, a la reducción de la jornada laboral o su complacencia con la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990)— generaron cuestionamientos.
No obstante, este año poco o nada se ha hablado de temas sociales en la carrera presidencial.
En los últimos años, Chile ha atravesado profundas transformaciones y ha sido testigo de fenómenos hasta entonces desconocidos para esta nación de 18,5 millones de habitantes. Entre ellos, la llegada de violentas bandas del crimen organizado y un flujo sin precedentes de inmigrantes, especialmente venezolanos.
En ese contexto, la delincuencia se disparó, siendo señalada como el mayor temor por dos tercios de los chilenos, según el informe Preocupaciones del Mundo divulgado en noviembre por IPSOS, que cada mes recoge la percepción de unas 25.000 personas en una treintena de países.
A su vez, un 40% manifestó preocupación por la inmigración sin control, a la que muchos atribuyen el aumento de la violencia urbana.
“Hay un momento de psicosis por la inseguridad”, dijo la peruana Naty Pérez, quien aseguró que votaría por Kast porque no quiere que el comunismo llegue al poder. La mujer también criticó el aumento exponencial del costo de vida y los altos precios de los servicios de salud pública en el país. “La gente está harta de la situación”, manifestó.
Las propuestas
Entre las principales promesas de Kast se encuentran la deportación masiva de los cerca de 330.000 inmigrantes indocumentados que actualmente residen en Chile y una mayor autonomía para las fuerzas de seguridad, como la policía y el ejército, para contrarrestar el poder de los narcos.
En el otro extremo se sitúa Jara, exministra del Trabajo de Boric, quien promete “medidas contundentes” para frenar el crimen y la migración irregular, pero también busca mantener una serie de beneficios sociales que impulsó durante su gestión, entre ellos una semana laboral más corta, una jubilación más generosa y un ingreso mínimo más alto.
Jornada sin incidentes
La jornada electoral transcurrió con tranquilidad. Aunque no se registraron mayores incidentes, un colegio de la ciudad costera de Valparaíso tuvo que ser evacuado por una amenaza de bomba, que rápidamente se confirmó como una falsa alarma.
Boric hizo un llamado a los chilenos para que ejercieran su derecho al voto y fortalecieran así la democracia. Se trata de “seguir construyendo un destino común, independientemente de las legítimas diferencias políticas que existan”, dijo en una rueda de prensa después de votar en su ciudad natal, Punta Arenas, en el extremo sur de Chile.
En el Estadio Nacional, uno de los puntos más concurridos de Santiago, miles de votantes sufragaron acompañados por sus hijos, perros y otras mascotas. El flujo de electores fue más ágil que en la primera vuelta. Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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