En el país, el comportamiento del Virus Sincitial Respiratorio (VSR) representa la señal epidemiológica más relevante de 2025, según el informe epidemiológico.
La circulación de virus respiratorios continúa alcanzando niveles significativos en el país y, de acuerdo con el boletín epidemiológico 49 emitido ayer por el Ministerio de Salud Pública, en este 2025 la actividad viral ha aumentado de forma sostenida, y la cocirculación de influenza A y B, SARS-CoV-2, adenovirus, parainfluenza y metapneumovirus se vuelve cada vez más persistente.
Esto indica, detalla el informe, un aumento en el riesgo de coinfecciones, exacerbaciones respiratorias y una mayor presión sobre los servicios asistenciales.
Se destaca que esta dinámica refleja lo reportado por la OPS/OMS en diversos países del hemisferio, donde las temporadas respiratorias recientes han sido más intensas, irregulares y prolongadas.
En el país, el comportamiento del Virus Sincitial Respiratorio (VSR) constituye la señal epidemiológica más destacada de 2025, según el informe epidemiológico.
Se resalta que, a partir de la semana epidemiológica 38, la registrada antes de este reporte, se observa un incremento pronunciado, alcanzando picos entre las semanas 40 y 45 que superan ampliamente los valores de 2024.
Además, están generando, agrega, una carga considerable de bronquiolitis, neumonía y hospitalizaciones en lactantes, un grupo altamente susceptible tras temporadas previas de baja exposición.
Salud Pública subraya que las condiciones climáticas —lluvias frecuentes, alta humedad y cambios térmicos— han contribuido a potenciar la transmisión, replicando patrones observados también en EE.UU., Canadá, Brasil y Chile, donde el VSR ha mostrado picos adelantados y de mayor magnitud.
Explica que este escenario ha incrementado la demanda en emergencias, hospitalización pediátrica y unidades de cuidados intensivos, donde pequeñas variaciones en la curva de virus respiratorios se traducen en presiones asistenciales significativas.
La complejidad generada por la cocirculación viral y el protagonismo del VSR exige una lectura cuidadosa de las tendencias, especialmente en poblaciones vulnerables y territorios con mayor actividad hospitalaria, destaca el informe epidemiológico 49, que recoge las notificaciones hasta el pasado día 6 de este mes.
Se señala que la vigilancia de virus respiratorios en 2024 mostró un comportamiento moderado y predecible, con picos claramente definidos de influenza A (H3N2) y B/Victoria, y una circulación limitada del Virus Sincitial Respiratorio y otros virus, consistente con el patrón postpandémico observado en la región.
El Ministerio de Salud Pública detalla que ha fortalecido la vigilancia virológica mediante la expansión del muestreo y la intensificación de la notificación inmediata a través del SINAVE.
Además, ha incrementado, indica, el monitoreo diario de la ocupación de camas, activado rutas de referencia rápida para pacientes pediátricos graves y garantizado la disponibilidad de insumos críticos.
Agrega que, paralelamente, se impulsa la vacunación contra la influenza en grupos de riesgo y se promueven intervenciones comunitarias orientadas a la higiene respiratoria, reducción del hacinamiento y consulta temprana, aunque señala que persisten desafíos estructurales, como la limitada disponibilidad de Unidades de Cuidados Intensivos, incluyendo neonatales (UCIN/UCI), y brechas en el acceso territorial.
Señala que este escenario reafirma la necesidad de estrategias sostenidas e intersectoriales para contener la morbilidad durante una temporada respiratoria más activa y prolongada. Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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