Washington — El Secretario de Estado, Marco Rubio, ordenó que la correspondencia diplomática deje de utilizar la tipografía Calibri y regrese al más tradicional Times New Roman a partir del miércoles, revirtiendo así un cambio implementado por la administración del expresidente Joe Biden. Rubio calificó a Calibri como una fuente menos formal, derrochadora, confusa e impropia de la dignidad que deben tener los documentos del gobierno de Estados Unidos.
“La tipografía determina cómo se perciben los documentos oficiales en términos de cohesión, profesionalismo y formalidad”, afirmó Rubio en un comunicado enviado el martes a todas las embajadas y consulados estadounidenses en el extranjero.
En dicho comunicado, señalaba que la adopción de la fuente Calibri sin serifas en 2023 fue resultado de las políticas erróneas de diversidad, equidad e inclusión implementadas por su predecesor, Antony Blinken. Rubio ordenó el regreso inmediato a Times New Roman, que había sido una de las tipografías estándar requeridas por administraciones anteriores.
“Se prometió que el cambio mitigaría los problemas de accesibilidad para personas con discapacidad”, indicaba el comunicado, que añadía que no se había logrado ese objetivo y que el cambio le había costado al departamento 145,000 dólares, aunque no proporcionaba evidencia alguna.
Desde que asumió el Departamento de Estado en enero, Rubio ha desmantelado sistemáticamente los programas DEI en línea con las directrices más amplias del presidente Donald Trump para todas las agencias federales. La administración Trump sostiene que el objetivo es regresar a estándares basados exclusivamente en el mérito.
Rubio ha eliminado oficinas e iniciativas creadas para promover y fomentar la diversidad y la inclusión, tanto en Washington como en embajadas y consulados en el extranjero, y también ha suspendido la financiación de ayuda exterior para proyectos DEI en el extranjero.
“Aunque el cambio a Calibri no fue uno de los casos de DEI más ilegales, inmorales, radicales o despilfarradores del departamento, sí fue un cambio meramente cosmético”, según el comunicado de Rubio obtenido por The Associated Press y publicado por primera vez por The New York Times.
“Cambiar a Calibri no logró ningún beneficio, salvo la degradación de la correspondencia del departamento”, agregó, señalando además que esta tipografía chocaba con la del membrete del Departamento de Estado.
Según otra nota enviada a los empleados del departamento, el regreso a Times New Roman entrará en vigor el miércoles y todas las plantillas de documentos oficiales deberán actualizarse para eliminar la fuente Calibri. Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
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