SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El sacerdote católico Mario Serrano leyó un documento del colectivo Marcha Verde, en el que manifestó que desde el Gobierno Central se han abierto las puertas de la frontera domínico-haitiana al narcotráfico, el tráfico de personas, armas de fuego y artículos comestibles.
“Las mafias políticas, comerciales y militares que operan en la frontera en un escenario para contrabandear de todo, para lo cual deben contar el respaldo de altas instancias del poder político de la Republica Dominicana. “, indicó el párroco.
Asimismo, demandó investigar dónde fueron a parar más de 700 millones de pesos, aprobados para la construcción de calles, carreteras y caminos vecinales de esta parte del país, el manejo de los acueductos del Noroeste, incluyendo el de mayor amplitud, donde supuestamente están implicados funcionarios de los institutos Nacional de Aguas Potables y de Recursos Hidráulicos.
Exigieron, además la construcción de un hospital regional y de dos presas, una en el distrito municipal Amina, perteneciente a esta provincia, y el otra en el municipio de Guayubin, de Montecristi.
La Marcha Verde, que recorrió los barrios de Mao esta mañana, considera que la corrupción a todos los niveles desvía recursos que deben servir para mejorar las condiciones de vida, salud, educación, alimentación y obras públicas a favor de los dominicanos.
El colectivo hizo un llamado a la ciudadanía de ampliar la lucha para lograr el fin de la impunidad y corrupción.





