SANTO DOMINGO. República Dominicana. La iglesia Monte de Dios celebró el congreso de mujeres “Déboras 2017”, con el que buscan a través de principios bíblicos y enseñanzas espirituales traer una transformación en la vida de las mujeres, edificándolas e instruyéndolas para convertirlas en verdaderas guerreras en lo espiritual y en lo natural.
Durante los días 10 y 11 de noviembre más de 1,300 féminas de diferentes puntos del país y del exterior estuvieron presentes en la Iglesia Monte de Dios donde de manera unánime exaltaron el nombre de Jesús.
De acuerdo a los organizadores el derramar del Espíritu Santo se hizo presente en cada sesión de la conferencia, donde se desarrollaron temas como La importancia de una relación con Dios, El corazón herido, Cómo madurar y desarrollar el carácter de Jesús, Las fortalezas mentales y la batalla de la mente.
El congreso que este año llevó por nombre “Despertad, tu tiempo ha llegado”, y cuentó con la participación desde El Paso, Texas, de la apóstol Patty Valenzuela y la profeta Diana Finkelstein de Miami, Florida, y como anfitriones el apóstol y la profeta Miguel y Motserrat Bogaert, quienes compartieron diferentes temas sobre aspectos espirituales para impulsar el crecimiento de cada mujer que asistió.
La pastora Montserrat Bogaert, explicó que este congreso se realiza a través del ministerio “Déboras edificadoras del reino, un ministerio que nació hace 13 años para impactar al mundo, liberando, sanando y restaurando a la mujer, llevándola a tener su identidad en Cristo Jesús, y de esta manera llevarle al mundo un mensaje de cambio y trasformación de parte de Dios.
Durante el desarrollo del evento, las asistentes fueron ministradas con la palabra de Dios la cual produce transformación y confrontación que le permite liberarse de ataduras que impiden el progreso y bienestar de sus familias.
De esa manera la mujeres llevan cambios a sus hogares que se manifiestan en sus hijos y en todas sus generaciones, puntualizó la pastora Bogaert.
Este evento que se celebra cada año incluye en su programa: dramas, danzas, alabanzas y enseñanzas espirituales, con el propósito de que se produzcan cambios que marquen un antes y un después en el estilo de vida de las mujeres asistentes.
