AFP.- El opositor venezolano Henri Falcón se declaró este viernes «seguro» de que un triunfo suyo en las presidenciales del 20 de mayo sería reconocido por los países que hoy censuran esas elecciones, en las que Nicolás Maduro busca la reelección.
«Una vez que cambiemos este gobierno, tengan la seguridad de que vamos a ser reconocidos por la comunidad internacional y vamos a rescatar las relaciones con nuestros aliados», dijo Falcón en rueda de prensa tras firmar un acuerdo de garantías electorales con Maduro y otro aspirante, el pastor evangélico Javier Bertucci.
Estados Unidos y varios gobiernos de América Latina desconocen el proceso, así como la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que lo tilda de «show fraudulento».
Falcón, un militar retirado de 56 años disidente del oficialismo, mostró confianza en superar sus diferencias con la MUD, de la que forma parte y que le exigió retirar su candidatura.
La alianza elevó el tono de sus críticas contra el político luego de que inscribiera su candidatura, acusándolo de hacerle «el juego» a Maduro.
«A los compañeros de la Mesa de la Unidad como siempre les extiendo mi mano y les expreso mi sentimiento de solidaridad, de respeto, y en algún momento, seguro estoy, vamos a coincidir en el camino», aseguró el exgobernador del estado Lara (oeste).
Más temprano, en una entrevista con Unión Radio, llamó a la coalición a abrir un diálogo para «reconstruir las relaciones» y comprender «que el adversario no es Henri Falcón, el que tienes al lado, sino el que tienes al frente».
A su juicio, las divisiones en la MUD son responsabilidad especialmente de los cuatro mayores partidos, entre estos los de Henrique Capriles y Leopoldo López -inhabilitados para competir- y el de Henry Ramos Allup.
«La MUD no pueden ser cuatro partidos, el G4 le ha hecho mucho daño», afirmó Falcón.
Según el dirigente, el enemigo a vencer es la «abstención», pues sostiene que la oposición tiene un potencial de nueve millones de votos, frente a cinco millones del chavismo.
Citando encuestas, sostuvo que «70% de la población quiere votar» en unos comicios a los que están llamados 20,4 millones de electores.
«¿Qué utilidad tiene no votar? Las elecciones son el 20, ¿qué nos dirán el 21? ¿Cuál es el plan (de quienes boicotean las votaciones)?», cuestionó.
