Ariana Grande fue una de las artistas que acompañó a Aretha Franklin en su funeral, interpretando una de sus canciones más populares ‘Natural woman’.
Al finalizar la canción, el obispo Charles Ellis III, encargado de oficiar la ceremonia, la tomó por la cintura pero, en lugar tocar su espalda respetuosamente con su mano, deslizó su brazo hasta el costado derecho de su pecho, algo que le provocó una evidente incomodidad a la artista.
Ariana se mostró bastante tensa por el suave movimiento que el hombre estaba haciendo con sus dedos mientras la tenía abrazada. El momento fue captado por las cámaras y por las personas que veían la transmisión de la ceremonia, lo que desató la ira de miles de usuarios en Twitter que denunciaron el hecho.
Con la etiqueta #RespectAriana varios usuarios mostraron su indignación y apoyo a la artista.
Después del revuelo mediático, el obispo se disculpó mediante un comunicado: Mi intención nunca sería tocar el pecho de ninguna mujer”. Quizás crucé la frontera, tal vez fui demasiado amigable o familiar, pero de nuevo, me disculpo”.
También pidió disculpas a la comunidad hispana por haberse burlado del apellido de la cantante: “cuando vi a Ariana Grande en el programa del funeral, pensé que era el nuevo plato de Taco Bell “.
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