Para Dombrowski, ésta será una experiencia completamente distinta, en comparación a cuando llegó a este punto la última vez que ganó un campeonato, en 1997 con los Marlins. Veintiún años atrás, Dombrowski recibió la orden del dueño Wayne Huizenga de salir de sus piezas más valiosas para comenzar una reconstrucción.
Hasta ahora, Dombrowski ha firmado a dos valiosos agentes libres que le ayudaron a conseguir el éxito en el 2018: El Jugador Más Valioso de la Serie Mundial, Steve Pearce, y al derecho lanzallamas Nathan Eovaldi. Ahora los Medias Rojas estarán en búsqueda de añadir aun más talento.
Otras dos piezas importantes del campeonato siguen sin firmar: Craig Kimbrel y Joe Kelly.
Es complicado imaginar un escenario en el que Kimbrel regrese a Boston, entendiendo lo que él está pidiendo en la agencia libre. Pero no descarten a Kelly, tras sus importantes presentaciones en octubre haciendo gala de una recta que marcaba los tres dígitos de velocidad.
Sin importar lo que pase con los Medias Rojas en la temporada muerta, el equipo se mantendrá muy similar al que quedó campeón.
“Pienso que tenemos un gran equipo, atlético y versátil”, dijo el manager del equipo, el boricua Alex Cora. “Estaremos bien ante cualquier cosa que pase en la temporada muerta”.











