LONDRES (Reuters) – Sus chaquetas y jeans, pulseras y carteras dan que hablar y hacen que las ventas de los diseñadores aumenten.
Desde que se catapultó a la escena global como la novia del príncipe Enrique en 2016, el vestuario de Meghan, de 37 años, ha sido observado y copiado, muchas veces llevando a páginas web rivales a vender sus vestidos.
Blogs de moda y cuentas en redes sociales dedicadas al estilo de la estadounidense han crecido, como pasa con su cuñada Catalina, la esposa del príncipe Guillermo, lo que permitió a sus seguidores a comentar sobre sus elegantes estilos usualmente en una paleta monocromática.
«El efecto Meghan es este fenómeno similar al efecto Catalina (…) donde lo que ella use se transforma en oro», dijo Christine Ross, codirectora editorial del blog de moda de Meghan del Mirror, que describe su estilo como «muy a la moda y moderno».
Casi todo lo que ella use hasta alrededor de los 300 dólares o libras, un precio de referencia bastante alto, se vende, agregó.
Vestidos de diseño, carteras lujosas y elegantes tacos son el sueño de muchas mujeres, pero para una joven integrante de la realeza son un básico de su guardarropa diario.
Para su ocupada agenda real, la nueva duquesa de Sussex suele usar marcas caras, como la casa de alta costura francesa Givenchy, cuya directora artística británica Clare Waight Keller diseñó el vestido de novia de Meghan.
Dior, Ralph Lauren, Carolina Herrera y Oscar de la Renta son algunas marcas más formales y de noche que suele usar. Se estima que su guardarropa tiene un valor de unas 500.000 libras (657.750 dólares) por año.
