(Voz de América).-Al menos cinco personas perecieron y unas 75 resultaron heridas en un poblado del centro de Bolivia, cerca de Cochabamba, en choques entre fuerzas del ejército y la policía con partidarios del expresidente Evo Morales.
Los enfrentamientos ocurrieron en la ciudad de Sacaba, donde cocaleros del Chapare, un bastión de Morales, trataron de llegar hasta Cochabamba para protestar contra la presidenta interina, Jeanine Añez, y reclamar el regreso de su líder.
Morales renunció el domingo tras semanas de manifestaciones por los resultados de las elecciones presidenciales del 20 de octubre y se refugió como asilado político en México a mediados de la semana.
Los manifestantes en Sacaba trataron de cruzar un puesto militar de control, donde opositores y seguidores de Morales se enfrentaron durante semanas.
El Defensor del Pueblo en esa ciudad, Nelson Cox, confirmó cinco muertos por impactos de bala, 26 heridos y 124 detenidos. La policía informó que a muchos detenidos se les decomisaron armas y explosivos.
Después, el director del hospital en Sacaba, Guadalberto Lara, dijo a la Prensa Asociada que 75 lesionados presentaban en su mayoría heridas de bala.
Cox afirmó que las fuerzas conjuntas de policías respondieron de forma “desproporcionada” a la manifestación y que en días anteriores hubo heridos de bala entre quienes protestaban.
Por su parte, la policía boliviana informó en Twitter de que los agentes “fueron atacados con armamento letal y armas de fuego improvisadas en el puente Huayllani”, entre las ciudades de Cochabamba y Sacaba.
CIDH condena uso desproporcionado de la fuerza policial y militar en Cochabamba #Bolivia que ya resultaron en 5 personas fallecidas e múltiples heridas. Las armas de fuego deben estar excluidas de los dispositivos utilizados para el control de las protestas sociales (1/6)
En La Paz, manifestantes afines a Morales chocaron con la policía que usó gases lacrimógenos para controlar la protesta.
Poco antes, Áñez denunció un supuesto “plan subversivo del régimen saliente que intenta destruir el Estado”.








