Que hay muchos que son corruptos, sí. Como hay gente corrupta en las empresas, en los gobiernos, en las universidad, en todo.
Como hay ciudadanos corruptos, pues para que haya un policía que tome un soborno, debe primero existir un ciudadano que le ofrezca ese soborno.
Es cierto, tenemos una República Dominicana donde las redes sociales están llenas de videos de agentes policiales agrediendo ciudadanos, pidiéndoles para la cena, o diciéndoles te voy a dar un chance, a cambio unos pocos pesos.
Hay de todo esto, es cierto. Hay de todo esto y más.
Pero también es cierto que en medio de la adversidad y la situación tan lamentable que vive la sociedad dominicana, ante una enfermedad como el coronavirus, que amenaza con no dejar nada a su paso, hemos visto policías que arriesgando su vida y la de su familia, se mantienen firmes en las calles.
Salen cada día a preservar la vida de quienes deberían estar en su casa, evitando contagiarse.
Hay 37 mil policías que no han tenido cuarentena, ni días libres y mucho menos descanso, para garantizar junto a los profesionales de la salud y miembros de las Fuerzas Armadas, que ante lo terrible de esta situación, los ciudadanos y ciudadanas podamos estar en paz, manteniendo un nivel de convivencia pacífica envidiable para otros tiempos.
Por eso, igual que cuando les cuestionamos por hacerlo mal, es el momento de reconocer la labor de los agentes de la Policía Nacional.
Debemos valorar su coraje y valentía de salir a las calles todos los días, con la misma fuerza con que le criticamos cuando hacen las cosas, porque carajo, no debemos ser tan mezquinos.