EFE.- Estados Unidos superó este domingo las cifras de 5.401.167 casos confirmados de COVID-19 y de 170.019 fallecidos con la enfermedad, de acuerdo con el recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins.
Este balance,, a las 20.00 hora local (00.00 GMT del lunes), supone 55.557 contagios más y 706 muertes más que el sábado.
Pese a que Nueva York ya no es el estado con un mayor número de contagios, sí sigue como el más golpeado en cuanto a muertos en Estados Unidos con 32.840, más que los contabilizados en Francia o España.
Otros estados con un gran número de muertos son Massachusetts con 8.826, Illinois (7.955), Pensilvania (7.453) y Michigan, con 6.592.
En cuanto a contagios, California suma 620.271, le sigue Florida con 573.416, tercero es Texas con 546.986, y Nueva York cuarto, con 425.508.
El balance provisional de fallecidos -169.841- ha superado ya con creces la cota más baja de las estimaciones iniciales de la Casa Blanca, que proyectó en el mejor de los casos entre 100.000 y 240.000 muertes a causa de la pandemia.
El presidente estadounidense, Donald Trump, rebajó esas estimaciones y se mostró confiado en que la cifra final estaría más bien entre los 50.000 y 60.000 fallecidos, aunque luego auguró hasta 110.000 muertos, un número que también se ha superado.
Por su parte, el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en cuyos modelos de predicción de la evolución de la pandemia se fija a menudo la Casa Blanca, calcula que para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre Estados Unidos habrá superado los 250.000 fallecidos y para el 1 de diciembre los 295.000.