Prensa Latina.- El primer ministro haitiano, Ariel Henry, condenó con vehemencia este martes el saqueo e incendio de un hospital en el extremo norte de Haití, y lo calificó de actos de barbarie y reprobables.
El jefe de Gobierno aseguró que estas acciones tienen como objetivo sembrar la anarquía en el país, además de poner en peligro la vida de las personas y los bienes.
Henry anunció que había dado instrucciones a las autoridades públicas para que investigaran y procesaran a los responsables para llevarlos ante la justicia.
El día anterior, hombres armados ingresaron al hospital Sacre-Coeur de la ciudad de Milot, rompieron las ventanas y destruyeron todo a su paso, además de amenazar al personal del servicio, confirmó el director Harol Previl.
Tanto el laboratorio como los registros de los pacientes fueron consumidos por el fuego, y el grupo intentó prender fuego al generador eléctrico del hospital.
“Hicieron el ataque con el pretexto de venir a buscar a un asesino que estaba hospitalizado”, dijo el director, quien calificó el ataque como terrorista y reveló que entre los asaltantes se encontraban ex empleados de la institución, previamente despedidos por malversación de fondos.
Previl anunció el cierre temporal de la clínica y el traslado de los pacientes afectados por Covid-19 al hospital Mirebalais, ubicado en el centro del país.
Haití está sumido en una espiral de violencia, con la multiplicación de bandas armadas en su territorio nacional, el aumento de secuestros, asesinatos y actos delictivos.