Nueva York, 10 mar (EFE).- El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este jueves con una caída del 2,46 % y se situó en 106,02 dólares el barril pese a la importante subida con la que abrió la jornada, una pronunciada variación fruto de la volatilidad que se ha apoderado de los mercados desde la invasión de Ucrania por parte de fuerzas rusas.
Tras la mayor caída en dos años registrada el miércoles, los inversores trataban este jueves de llegar a una conclusión sobre las posibles alteraciones en el suministro de crudo, marcado por el veto a las importaciones de crudo ruso anunciado por Estados Unidos.
El mercado intenta entender cómo se puede compensar ese hueco, que podría en parte neutralizarse con un aumento de producción anunciado por Emiratos Árabes Unidos, aunque los analistas apuntan que los países de la OPEP y sus socios deberán hacer lo propio.
“El incremento unilateral de Emiratos sin participación saudí no sería en absoluto suficiente para cubrir las carencias, reales o percibidas, en el mercado”, señaló en una nota la experta Louise Dickson, de la firma Rystad Energy.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció en una reunión de su gobierno que su país seguirá cumpliendo con sus obligaciones contractuales en términos de suministro de materias primas energéticas a otros países, lo que calmó en parte al mercado.
Desde que Rusia comenzó la invasión de Ucrania, hace casi dos semanas, y tras las duras sanciones de los países occidentales a su economía y sistema financiero, los precios de los combustibles se han disparado por el temor a que haya escasez global del suministro.








