Con solo 14 escaños pendientes de definición, en este momento se proyectan 204 puestos para los demócratas y 217 para los conservadores, quienes se ubican a solo un asiento de conseguir la supremacía en esa instancia legislativa.
En el primer distrito de Arizona, el representante republicano David Schweikert derrotó por poco al demócrata Jevin Hodge, mientras que el conservador Juan Ciscomani venció a la liberal Kirsten Engel en el sexto distrito, apuntó el diario Politico.
Los representantes Michelle Steel y Ken Calvert, ambos afiliados a la tolda roja, ganaron en sus distritos del sur de California, mientras Brandon Williams también salió victorioso en el área de Syracuse, en el norte del estado de Nueva York.
También hasta la fecha en muchas de las últimas contiendas aún no definidas en California lideran los republicanos, pues los legisladores David Valadao y Mike García marchan delante, así como el aspirante Kevin Kiley.
Los conservadores también tienen una pequeña ventaja en el tercer distrito de Colorado, con la representante Lauren Boebert a la cabeza por poco más de mil votos.
Ganar un escaño más permitirá a los republicanos recuperar el control de una cámara que habían cedido en las elecciones intermedias de 2018, después de permanecer durante ocho años como la mayoría, recordó la fuente.
Sin embargo, acotó asimismo, que los demócratas no resultaran descartados por completo hasta una semana después de las elecciones es un cambio sorprendente con respecto a las predicciones preelectorales.
Los republicanos habían pronosticado una «ola roja» incluso en la mañana de las sufragios, pero su mayoría en la Cámara Baja, si a la postre prevalecen en el recuento final, probablemente será bastante estrecha, apuntó.
Aún cuando en el Senado los identificados con el color azul ostentan 50 asientos, de vencer en la segunda vuelta electoral en Georgia, a celebrarse el próximo 6 de diciembre, reafirmarían de manera aún más contundente su poder en esa instancia legislativa.