Madrid – El Atlético de Madrid sufrió una derrota histórica en casa ante el Rayo Vallecano en un recital de fútbol (7-0).
Una noche tranquila para los de Vallecas. También fue inesperada. Todo fue efectivo. El partido duró 34 minutos, pero cada vez que el equipo visitante se enfrentaba a la defensa local realizaba una gran actuación, mientras que al mismo tiempo el Rayo se autodestruía cerca de la portería. Inquieto, desconcentrado y fácilmente atacable, el Rayo se expuso a un daño casual, que ni detectó ni contrarrestó, y encajó su primer gol de la temporada.
A dos puntos del líder, el Real Madrid, la eficacia del Atlético fue directamente proporcional a los fallos defensivos de su rival. Después de dos partidos y tres horas invicto desde el comienzo de la temporada, la desorganización defensiva del Atlético fue asombrosa. En la primera parte no tenían ni idea de lo que hacían ante un rival tan grande.
El Atlético no les dejó salirse con la suya. Fueron derrotados en poco tiempo. No hay más explicación que una combinación de carencias de Laesta y acierto en el área, pero cuando sucede lo primero, como en el 0-1, donde Memphis Depay ganó un balón que no debía, lo segundo se hace más fácil. Tampoco debería haber tenido tanto tiempo para pensar ante los pensamientos de su rival.
Tampoco debería haberlo hecho Rodrigo de Paul, el siguiente paso tras la combinación de Griezmann que acabó 0-1. El internacional francés se desmarcó por detrás de su marcador, se plantó solo en la banda izquierda y remató de puñalada.
Un buen pase de De Paul y un remate impecable de Griezmann bastaron. La cosa no acabó ahí. El ataque del Atlético también. Y la táctica del Rayo, también: a los cinco minutos, Saur le dio otra oportunidad a Memphis. Dio en el portero y falló, pero fue un respiro para los locales. Fue sólo por un momento. A la media hora, un mal despeje de Aridan y un disparo con alegría del delantero holandés. Muscularidad.
El Rayo demostró su carácter. Hasta entonces, la presión arriba no había servido de mucho. Tampoco lo había sido desde entonces. Dos malas suertes de Jan Oblak acabaron con las esperanzas del Rayo. La visión de juego y los magníficos pases de De Paul le permitieron detectar la internada de Nauel Molina por la banda derecha y disparó con precisión para poner el 0-3 en el marcador. Era el minuto 36 del mejor regreso del lateral a los terrenos de juego desde su lesión de un mes.
Más que eso, el centro del campo del Atlético cuajó una gran actuación, con De Paul asistiendo en el primer y tercer gol, y el intenso, rematador, ágil conductor de balón Saúl, que fue el pasador del 0-2 y del posterior 0-4, recibiendo el visto bueno debido al bajo estado de forma de Lemar (como sustituto de Marcos Llorente No sólo porque tuvo la oportunidad de jugar en el once (y no como suplente de Marcos Llorente), sino porque Pablo Barrios demostró que era exactamente lo que Simeone había previsto hace unos meses: un mediocentro.
Mientras el técnico argentino digiere y acepta que el jugador que tanto pidió para reforzar esa posición hace unas semanas no vendrá, el chico local mantiene su reivindicación como opción fiable en ese puesto.
Sabe leer el momento. Entiende perfectamente las peculiaridades de la posición. En cada espacio que el equipo encontraba, en cada cobertura, él lo suplía todo.
Está progresando en su adaptación a esta posición, a la espera de que Koke se recupere y a ver si el futuro le depara más competencia. El mercado se cierra el 1 de septiembre a medianoche. En la segunda parte, el Atlético de Madrid se marcó un gol en propia puerta que reafirmó a Witsel como central y aseguró una renta de tres goles.
Pese a todo, el Rayo lo intentó. Neteka y Pate Chisu sustituyeron a Trejo y Unai Lopes nada más reanudarse el encuentro. Sergio Camello también fue introducido justo antes de la hora de juego. Sergio Camello fue introducido de nuevo justo antes de la hora de juego. El Atlético invocó el elemento más importante de Simeone, «forzar en el área», ya que Morata marcó el 0-4, Correa el 0-5, el delantero español el 0-6 y Llorente el 0-7 a pase de Saúl.