Ciudad de México – Durante la sexta sesión del Segundo Curso de Salud Mental y Adicciones, expertos destacaron que en 2022 se registraron un total de 8 mil 237 casos, lo que significa que en México, sobre todo. Destacaron que la prevención del suicidio en el sector juvenil es «sumamente importante».
Abril de Yanira Telles Buendía, coordinadora operativa del Programa Nacional de Prevención del Suicidio de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones, dijo que las actividades de sensibilización en diferentes ámbitos, como escuelas, centros de trabajo, espacios públicos y centros de servicio, para identificar factores de riesgo y acciones preventivas tempranas de la conducta suicida son Afirmó que es fundamental.
El fenómeno fue analizado en un taller organizado por la Comisión de Salud, presidida por la senadora Lilia Margarita Valdés Martínez, en el marco del Día Mundial para la Prevención del Suicidio.
Terez Buendía señaló que en 2022, la cifra anual del INEGI de 8 mil 237 muertes por suicidio fue de 2 mil 271 en personas de 25 a 34 años y de 2 mil 6 entre 15 y 24 años.
Además, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, hubo un total de 232 suicidios en menores de 15 años, con un incremento importante en la población adolescente de 10 a 14 años.
De acuerdo con Avril Deyanira, en 2021 se registraron 6.6 suicidios por cada 100 mil habitantes, mientras que en 2022 fueron 6.4.
Pamela Espinosa Mendes, encargada de los programas de prevención del suicidio, explicó que un fenómeno tan complejo suele estar plagado de mitos, que a su vez crean prejuicios negativos contra las personas que tienen conductas de riesgo, lo que aumenta su vulnerabilidad en situaciones como el acceso a apoyo y ayuda.
Dados los prejuicios que rodean al suicidio, la mayoría de las personas que lo contemplan carecen de la confianza necesaria para confiar sus sentimientos a alguien.
Por ello, Espinosa Mendes afirmó que cada persona que experimenta un comportamiento suicida es diferente y lo expresa de formas distintas, lo que requiere una atención e intervención diferente por parte del personal profesional.
Como orientación, ofreció una serie de sugerencias y herramientas para identificar señales de alerta y factores de riesgo, que pueden servir para escuchar, apoyar y acompañar, dijo.
Los especialistas afirmaron que cuando descubren conductas suicidas en alguien cercano, deben escuchar el problema, crear un ambiente de comunicación franca, mostrar empatía y sensibilidad ante expresiones difíciles, evitar críticas e interrupciones, explorar posibilidades de apoyo social, identificar la posibilidad de buscar ayuda profesional y promover factores de protección decía el informe.
En este contexto, el Dr. Jorge Julio González Olvera, Director de Desarrollo de Modelos de Atención en Salud Mental, consideró que este tema es uno de los ejes de la política pública actual y que debe ser mejor comprendido en todos los niveles y encontrar formas de reducir el miedo, los estereotipos y las prácticas discriminatorias.
Destacó la necesidad de combatir el estigma que rodea al suicidio para lograr una sociedad incluyente y equitativa, independientemente de los problemas de salud mental o adicciones. También comentó que son los medios de comunicación y los líderes de opinión los que tienen que cuestionar las representaciones estigmatizadoras que siguen existiendo de una forma más matizada. Etiquetar a las personas como alcohólicas o drogadictas es una expresión que subvierte una visión multifacética del ser humano como entidad holística».
Cabe señalar que la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones publicó el 4 de septiembre un folleto básico sobre la prevención del suicidio.
Proporciona conocimientos y habilidades básicas para prevenir el suicidio en la población en general y es una herramienta para fomentar un ambiente de apertura mental, comprensión y apoyo que contribuya a la prevención y bienestar integral de las personas, con un enfoque particular en los jóvenes.
AM.MX/fm’.