Almería, 20 Sep (EUROPA PRESS) -.
Un juez impuso el pasado lunes en Almería las medidas cautelares de alejamiento de 200 metros e incomunicación a una enfermera acusada de besar sin consentimiento previo a una compañera durante la pausa para el café.
En concreto, la víctima denunció ante las autoridades la presunta comisión de los delitos de agresión sexual y acoso laboral a posteriori y supuestas insinuaciones de “naturaleza sexual” que, según el testimonio de la víctima, habría cometido el acusado.
El episodio habría ocurrido la mañana de la conferencia, cuando los asistentes abandonaban la sala durante un descanso entre ponencias, momento en el que la víctima y el acusado fueron escoltados por otras personas fuera de la sala y el acusado comenzó a sonarse la nariz. La mujer, que conocía al acusado desde hacía tiempo por su ocupación, le dijo entonces “en broma” que se alejara de ella porque podía estar infectada con Covid.
Según el testimonio de la víctima, fue entonces cuando el hombre le agarró “fuertemente” la cara y el cuello, le acercó la cara y la besó “contra su voluntad”. También se quejó de dolor en el cuello tras este acercamiento.
El acusado, que tuvo que declarar sobre este incidente tanto ante la Policía como en sede judicial, reconoció que había besado a la mujer, pero ‘en la mejilla’ en el contexto de la misma broma.
El hombre negó que hubiera tenido algún desencuentro previo con la víctima, ya que, según declaró, la mujer podría haberse sonado la nariz o tener cóvido. Según su testimonio, a continuación la besó y luego le dijo que era ‘alérgico’.
El hombre admitió que sus actos, que entendió “hechos en broma”, no gustaron a la víctima, por lo que le pidió disculpas. Sin embargo, insistió en que no la había forzado. También declaró que tenía intención de someterse a una prueba de covigilancia más tarde ese mismo día e informar de los resultados a su supervisor mutuo. La investigación sigue su curso.