Santo Domingo, 23 sep (EFE) – La República Dominicana y España han suscrito una «alianza estratégica» para acelerar la implementación del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático en el Caribe.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales dominicano informó este sábado en un comunicado que el director general de esa cartera, Miguel Ceará Hatton, y la ministra de Transición Ecológica y Desafíos Demográficos de España, Teresa Rivera Rodríguez, abordaron la alianza acordada en una reunión celebrada al margen de la 78 Asamblea General de la ONU en Nueva York el pasado jueves dijo.
De acuerdo con la información, las líneas de acción del acuerdo se definirán a partir de la implementación de un modelo de cooperación en el que el Gobierno, instituciones financieras públicas y privadas y otros actores desarrollarán proyectos atractivos dirigidos a hacer a la República Dominicana más resiliente a los efectos de la crisis climática.
La alianza forma parte del proyecto Acelerador de Carteras de Proyectos de Adaptación (APA), promovido por el Secretario General de las Naciones Unidas, para ayudar a los países en desarrollo a transformar las prioridades de adaptación a la crisis climática en planes de inversión para toda la economía y en proyectos atractivos para la inversión pública y privada. Les presta apoyo para transformarlos en una cartera de proyectos atractivos para la inversión pública y privada.
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Milagros de Camps, Viceministra de Cambio Climático de la República Dominicana, describió la iniciativa como un logro para su país: «Esta alianza acelerará los proyectos de adaptación a la crisis climática, con especial atención a los sistemas de alerta temprana y prevención de riesgos».
También afirmó que «reducir la vulnerabilidad y aumentar la resiliencia de los más vulnerables es una prioridad urgente para el país». En este contexto, afirmó que «España ha sido y seguirá siendo un socio cercano en estos esfuerzos».
Afirmó que «la adaptación al cambio climático es una prioridad absoluta para los países más infrafinanciados y vulnerables, como los Estados insulares», entre los que se encuentra la República Dominicana.
El ministro de Camps subrayó que «la República Dominicana cuenta con un plan nacional de adaptación y lo que se requiere ahora es que el Gobierno, los socios de desarrollo y los financiadores públicos y privados se coordinen y colaboren para ayudar a hacer realidad nuestros planes y ambiciones».
Por su parte, el ministro español Rivera Rodríguez subrayó que «la asociación con la República Dominicana se basa en el firme compromiso y el interés común de ambos países por promover una adaptación transformadora en el centro de las políticas públicas».
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Asimismo, aseguró que «el Acelerador de Tuberías de Adaptación mejorará la coordinación de las necesidades financieras, que es clave para crear resiliencia en la isla».
Según la declaración, de acuerdo con la ONU, las necesidades de adaptación en los países en desarrollo aumentarán hasta los 340.000 millones de dólares anuales en 2030, pero el apoyo actual a la adaptación es inferior a una décima parte de esa cantidad.
Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), 3.000 millones de personas en todo el mundo son ya muy vulnerables al cambio climático. Entre 2010 y 2020, la mortalidad humana por inundaciones, sequías y tormentas fue 15 veces mayor en las zonas altamente vulnerables, según el Ministerio de Medio Ambiente dominicano.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha pedido una mayor inversión mundial en adaptación para apoyar a los países en desarrollo, ya que el cambio climático sigue aumentando en frecuencia e intensidad en todo el planeta y, sin embargo, la financiación para hacerle frente no ha aumentado al mismo ritmo.
Por: efe’.
