Belgrado, 4 oct (EFE) – Desde que el nacionalista Albin Kurti asumió la jefatura del Gobierno de Kosovo hace dos años, la población serbia, un grupo minoritario en Kosovo en el norte de Kosovo ha sido “diezmada”, según afirmaron las autoridades serbias.
El Secretario de Estado del Ministerio serbio de Defensa, Nemanja Starovic, declaró en la red social X (antes Twitter) que el 11% de los serbios del norte de Kosovo habían abandonado la región durante este periodo.
Acusó a los serbios de ser “acosados a diario” por la policía especial de Kosovo.
Parece increíble que se esté produciendo una limpieza étnica tan silenciosa en plena Europa del siglo XXI, pero los hechos sobre el terreno concuerdan con la triste verdad”, afirmó Starovic.
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Starovic señaló que muchos factores internacionales intervienen en la situación de Kosovo, pero sus “ojos vigilantes” permanecen cerrados por ignorancia, prejuicios y parcialidad.
Los serbios representan alrededor del 5% de los 1,8 millones de habitantes estimados de Kosovo, antigua provincia de Serbia que declaró su independencia en 2008, pero Belgrado y la mayoría de los serbokosovares no los reconocen.
La Unión Europea (UE), con el apoyo de Estados Unidos, ha mediado en difíciles negociaciones para normalizar las relaciones entre Kosovo y Serbia.
Recientemente, el 24 de septiembre, una treintena de paramilitares serbokosovares atacaron una patrulla de la policía kosovar en la ciudad septentrional de Baniska, matando a un policía kosovar y a tres atacantes.
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Milan Radojicic, ex vicepresidente de la Lista Serbia, el mayor partido serbio de Kosovo apoyado por Belgrado, asumió la autoría del atentado y está siendo investigado en Serbia por tenencia y tráfico de armas y delitos graves contra la seguridad.
Radojcic fue interrogado ayer en la Fiscalía de Belgrado, pero el juez instructor ha denegado hoy la prisión preventiva alegando que no existe riesgo de fuga, ya que se le ha incautado el pasaporte y tiene prohibido salir de Serbia y entrar en territorio kosovar.
El Gobierno de Kosovo acusa a Serbia de estar detrás del ataque, lo que las autoridades serbias niegan, mientras que Pristina les acusa de provocar la escalada y discriminar a los serbios.
Por: efe’
