WASHINGTON – Continúan las interminables negociaciones dentro y fuera del Congreso, pero de momento no se ha logrado ningún avance.
La Cámara de Representantes lleva más de una semana paralizada y sin salida a la vista.
El Congreso tiene un Senado y una Cámara de Representantes, y mientras el Senado cuenta con una mayoría demócrata liderada por el presidente Joe Biden, la Cámara está sumida en una agitación sin precedentes.
El anterior presidente de la Cámara, Kevin McCarthy, fue destituido el 3 de octubre debido a un conflicto entre los republicanos moderados y los partidarios del expresidente Donald Trump.
A un año de las elecciones presidenciales de 2024, la salida del presidente McCarthy ha puesto de manifiesto una importante fisura en el movimiento conservador.
Y el Parlamento, supuestamente el más poderoso del mundo, ha llegado a un punto muerto.
Estados Unidos no puede votar a favor de nuevas ayudas a su aliado histórico Israel en un momento en que está en guerra con el movimiento islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza. Tampoco puede votar a favor de una nueva financiación para Ucrania, que los legisladores llevan semanas debatiendo.
Aunque el presupuesto anterior expira en unas semanas, el Estado federal no puede votar un nuevo presupuesto, y una de las principales economías del mundo se verá amenazada una vez más por la parálisis administrativa.
Se han barajado varias vías para poner fin a esta situación.
Dos candidatos, uno moderado en el partido y otro cercano a Trump. Las dos facciones enfrentadas se enfrentaron el miércoles en una votación informal.
El líder de la facción republicana, el representante estatal de Luisiana Steve Scalise, derrotó a Jim Jordan, afín a Trump.
Scalise quería llevar la nominación a votación inmediata, lo que era un paso necesario, pero los 12 conservadores dijeron que se opondrían por varias razones, entre ellas la posición presupuestaria del congresista, su cáncer y un discurso que pronunció en la convención de hace 20 años sobre antiguos líderes del Ku Klux Klan Declaró.
‘Steve es alguien que tiene serios problemas debido al cáncer’, dijo Trump en una entrevista, ‘y prefiere evitar el ‘estrés’ del trabajo’.
Cuántas horas, días o semanas durará el cierre patronal? Nadie lo sabe y la confusión reina en el partido (AFP)».
