Zhang Longji ha sido condenado a muerte por violar a cinco niñas de entre 8 y 12 años y abusar sexualmente de otras 17 de entre 8 y 14 años, informa el medio local China Daily.
El Tribunal Popular Intermedio de Pingliang declaró a Zhang culpable de violación y le condenó a muerte debido a la gravedad del delito.
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Zhang recurrió la sentencia, pero el Tribunal Popular Superior provincial rechazó el recurso y mantuvo la pena máxima.
Según China Daily, las autoridades educativas locales comenzaron a prestar asistencia y apoyo a los estudiantes afectados, aunque no se revelaron los detalles concretos del caso debido a la implicación de menores.
El tribunal declaró entonces que siempre ha concedido gran importancia a la protección de los derechos e intereses de los menores y ha aplicado la pena de muerte a un número muy reducido de delincuentes que han cometido delitos especialmente atroces o de extrema gravedad.
Las autoridades chinas no han facilitado datos oficiales sobre el número de personas condenadas a muerte, pero la organización de derechos humanos Amnistía Internacional señaló en su informe anual correspondiente a 2022 que es probable que se hayan ejecutado varios miles de condenas a muerte en el país.
La violencia contra las mujeres y las niñas es una grave violación de los derechos humanos, y el derecho de las mujeres a vivir libres de violencia está consagrado en acuerdos internacionales. En todo el mundo, sólo el 40% de las mujeres buscan ayuda tras ser víctimas de violencia, lo que obliga a los organismos a promover políticas de prevención y apoyo.
