Ciudad del Vaticano.- El Papa Francisco advirtió el jueves que muchos de los conflictos actuales están alimentados por noticias falsas y Por eso es importante apoyar el desarme de la lengua y, respetuosamente, en la audiencia a la delegación de la Asociación de periodistas católicos alemanes con motivo del 75º aniversario de su fundación. ¡Cuántos conflictos hoy, en lugar de ser sofocados mediante el diálogo, son alimentados por noticias falsas o declaraciones incendiarias transmitidas a través de los medios de comunicación!, afirmó el Papa en un discurso preparado y enviado a los participantes en el encuentro. Lea también: Papa Francisco dice que la guerra es una locura y siempre es un fracaso El Papa añadió que esto es una necesidad urgente en la sociedad, pero la Iglesia también necesita una comunicación bondadosa y al mismo tiempo profética, porque la comunicación ayuda, como dice el apóstol Pablo, a que los miembros de cada uno de ellos sean llamados a vivir en comunión.
. en una red de relaciones en constante expansión. Francisco también saludó la propuesta de la asociación alemana de publicistas católicos de comprometerse con el ecumenismo, el diálogo interreligioso y la defensa de la paz, la libertad y la dignidad humana, objetivos todos ellos muy presentes.
Y les advierte que el Dios del amor espera la buena noticia de nuestra caridad: espera que los cristianos salgan y tiendan la mano a los marginados. Y para ello, también necesitamos comunicadores que destaquen las historias y los rostros de personas que prestan poca o ninguna atención. Porque Alemania es un país próspero y desarrollado, pero también tiene muchos problemas, a veces incluso ocultos.
Pienso en el fenómeno de la pobreza infantil, en las familias que no saben cómo pagar las cuentas y en la situación de tantos inmigrantes y refugiados, a quienes Alemania ha acogido en gran número, explicó. Cuando te comuniques, piensa siempre en los rostros de las personas, especialmente en los pobres y sencillos, y de ellos, en su realidad, en sus tragedias y esperanzas, ¡aunque eso signifique ir contra la tendencia y desgastar las suelas de los zapatos!, las concluyó el Papa.
