En 2015, Lilian dio a luz en un hospital público de Santa Ana, oeste de El Salvador, pero su bebé tuvo algunas complicaciones y la colocaron en una incubadora, tras lo cual, su La abogada defensora Abigail Cortez dijo a la AFP que murió después de 72 horas. Una salvadoreña condenada a 30 años de prisión por la muerte de su hijo recién nacido recuperó la libertad tras casi ocho años de prisión tras una revisión de su condena, anunció el miércoles una organización feminista que denunció que este caso criminaliza el acto de ‘dar a luz’. Lilian, que prefiere identificarse sólo con ese nombre, fue liberada en diciembre pasado y compareció este miércoles en una conferencia de prensa junto a activistas de Ciudadanos por la Despenalización y la demonización del aborto.
La mujer de 28 años dijo a la AFP: Estoy muy satisfecha porque a pesar de tener que pasar por un proceso muy largo (en prisión), mi inocencia ha sido probada. Según el Grupo Ciudadano por la Legalización del Aborto, Lilian fue la última mujer detenida entre 73 personas condenadas por aborto o urgencias obstétricas, acusadas de homicidio capital. En 2015, Lilian dio a luz en un hospital público de Santa Ana, oeste de El Salvador, pero su bebé tuvo algunas complicaciones y fue colocado en una incubadora, donde luego murió 72 horas después, dijo a la AFP su abogada defensora Abigail Cortez.
Según la defensa, el hospital fue negligente en el cuidado del bebé pero para evitar responsabilidad acusó a Lilian de abandono y negligencia. La fiscalía presentó cargos de asesinato capital, por lo que fue condenada a 30 años de prisión. En 2023, el tribunal revisó la sentencia y ordenó su libertad.
Estamos encantados de cerrar un ciclo, al final de la llamada campaña de 17 y más, que comenzó en 2014 con el apoyo de la solidaridad”, dijo Mariana Moisa, coordinadora del Grupo Ciudadano Internacional. Sin embargo, aclaró que aún quedan alrededor de 20 casos en curso que deben ser cerrados o llevados a los tribunales. El Código Penal salvadoreño prevé una pena de dos a ocho años de prisión por aborto en todos los casos.
Sin embargo, los fiscales y jueces suelen clasificar los casos de aborto o incluso la pérdida intencionada de un bebé como asesinato capital, un delito castigado con entre 30 y 50 años de prisión. La dureza de las leyes salvadoreñas en materia de aborto quedó de manifiesto en 2013 con el caso de Beatriz, una joven de 22 años con lupus a quien se le prohibió abortar aunque el feto aún no había desarrollado cerebro y fue condenada. morir.
El 3 de junio de 2013, tras la intervención de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el Estado autorizó una cesárea a Beatriz, y la bebé falleció pocas horas después. Beatriz murió en un accidente de tránsito en 2017, pero la Corte IDH se pronunciará sobre el caso en los próximos meses.