NUEVA YORK.- De 2019 a 2023, 221 287 personas murieron y 185,224 personas Murieron Otros resultaron heridos, incluidas decenas de miles de personas gravemente heridas por disparos en los Estados Unidos. De ellos, 95.598 fueron asesinatos y 125.689 suicidios, según estadísticas del Archivo de Violencia Armada (GVA), con sede en Washington, D.C., que registra la violencia armada y los crímenes con balas en Estados Unidos. Entre los muertos y heridos en el tiroteo se encontraban decenas de dominicanos que residían en varios estados de Estados Unidos, incluidas las áreas de Washington Heights e Inwood en el Alto Manhattan.
Durante estos cinco años, el número de muertes superó el número de residentes de 18 provincias individuales de República Dominicana, según datos comparativos del GVA y el último censo nacional realizado en el país caribeño. Muertes en Estados Unidos, total de residentes de las provincias de Peravia = 209,372; Montaña de Plata = 205.499; Barahona = 200.884; Monseñor Nouel = 195.547; Valverde = 183.738; Sánchez Ramírez = 162.638; María Trinidad Sánchez = 156.633; y Montecristi = 123.519. De igual forma, en Samaná = 111,990; Bahoruco = 108.717; hermanas Mirabal = 96.442; Rebaño más grande = 100.134; Dajabón = 74,809; San José de Ocoa = 69.081; Elías Piña = 64.615; Santiago Rodríguez = 64.635; Independencia = 60.692; y Pedernales con 34.375.
En 2024, hasta este domingo, 3.790 personas en Estados Unidos han sido asesinadas a tiros y 2.422 han resultado heridas, cientos de ellas en estado grave. Según la organización suiza Small Arms Survey (SAS), en Estados Unidos hay 120 armas de fuego por cada 100 habitantes, lo que lo convierte en un país con más armas que habitantes. Solo en 2018, los fabricantes de armas estadounidenses produjeron 9 millones de armas, más del doble de la cantidad producida en 2008, según la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de Estados Unidos (ATF).
La Segunda Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos, de fecha 12 de diciembre de 1791, protege el derecho de los estadounidenses a poseer y portar armas. Es parte de la Declaración de Derechos de Estados Unidos.