(1) Es preocupante el nivel de pagos del servicio de la deuda pública, pagos por unos 55 mil millones de pesos, sólo en enero de este año, un aumento de unos 17 mil 500 millones respecto a enero de 2023, hablemos de unos 1,830 millones de pesos diarios, que son unos 1,830 millones de pesos. por día. deben y pueden ser utilizados para obras de infraestructura, caminos vecinales, autopistas, vivienda y en definitiva entidades multiplicadoras del desarrollo.
Por su parte, el Banco Central de la República Dominicana emite publicaciones periódicas sobre poner más deuda en circulación, lo que agrava aún más la situación a la que nos referimos, que se ha disparado exponencialmente desde 2020, en una espiral ascendente, casi vertical. Hay que decir más sobre esto, las elecciones en nuestro país casi impusieron una parálisis total de los medios de producción así como la adopción y anticipación de inversiones, veamos qué puede pasar o qué pasará, incluso si este elemento de incertidumbre ha se ha reducido significativamente gracias a la institucionalización de las elecciones, ya no duele tanto como antes. Este nivel particular de deuda, al menos en nuestra opinión, y como hemos señalado, con pagos de intereses tan absurdos y desproporcionados, por el contrario, no contribuye en nada a la solución de carreteras, las obras de infraestructura y el desarrollo.
tiende al clientelismo más bárbaro y trata de aplacar a las masas con los más variados bonos, que pagan más por este clientelismo rampante, que si antes daba miedo hoy está en un nivel vil. Esto impide, como hemos visto, realizar un trabajo de calidad o incluso realizar cualquier trabajo. Así vemos que obras importantes y lucrativas como la circunvalación de Baní no se realizan, la renovación de la autopista Duarte sólo existe en la prensa y en los anuncios gubernamentales, el metro de Los Alcarrizos parece abandonado, la circunvalación de Navarrete no arranca, la carretera de Barahona a Pedernales, muchas gracias, el muro fronterizo no pasa del mínimo que se ha hecho, y en fin, en la superficie es que este gobierno está haciendo el trabajo, pero en realidad así es.
nadie puede quedar expuesto en términos de prestaciones, salvo el teleférico de Alcarrizos y la variante de Azua, cuyos costes especiales no son razonables, porque lo redujeron de cuatro a dos carriles sin ningún motivo claro.