El presidente de la Corte Suprema de Justicia (SCJ) y del Consejo de la Judicatura (CPJ), Henry Molina, encabezó hoy este viernes el acto de izamiento de la bandera nacional, donde Reafirmó que el deber de este poder del Estado es defender los principios democráticos que sustentan el Estado de derecho por el cual el pueblo hondureño ha luchado a causa de él. ‘Como poder judicial, honramos el inspirador espíritu de solidaridad de estos pioneros, que también afrontaron las dificultades con valentía y solidaridad’, explicó, conscientes de que sólo juntos podemos alcanzar nuestros objetivos. Asimismo, Henry Molina asegura que los esfuerzos del Poder Judicial por mantener una justicia actualizada responden al anhelo común de brindar un servicio de integridad, calidad y apertura, desde que trabajan más de siete mil personas en la organización hasta llegar a toda la población.
Sociedad Dominicana. Dijo que hoy el sistema judicial dominicano se encuentra en un momento de transformación histórica, construyendo un sistema que promueva la convivencia, la libertad y la igualdad para todos, con una institución que garantice la dignidad humana, capaz de dar respuestas a las necesidades de las personas. ahora y futuro.
Hoy, los dominicos continuamos nuestro legado trinitario trabajando con amor y sacrificio, poniendo a las personas y sus necesidades en el centro de nuestro trabajo. Porque este es el verdadero servicio a nuestro país con el que soñaron los fundadores, afirmó el presidente de la corte. Al acto asistieron Magistrados miembros del Pleno de la Corte Suprema de Justicia y miembros del Consejo de la Judicatura; así como funcionarios y funcionarios judiciales.
Durante el izamiento de la bandera tricolor por parte de miembros de la Policía de Protección Judicial, el coro del Poder Judicial interpretó las notas heroicas del himno nacional dominicano, acompañado por el grupo musical de la Policía Nacional. Luego el cantante Nairoby Duarte interpretó el Canto a la Patria de Juan Luis Guerra; y La soja dominicana, de Fernando Villalona, acompañada al piano por Álmaro Dinzey.