La guerra de Javier Milei con los gobernadores de Estados Unidos parece no tener fin. Ante el feroz enfrentamiento con el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, el Presidente sumó ayer un nuevo ataque al titular del Ejecutivo cordobés, Martín Llaryora, quien, según él, cumplió un papel sucio. En entrevista con el canal de televisión La Nación +, Milei alegó, desde Washington, que el gobernador de Córdoba no quiere renunciar a ningún privilegio de clase.
Al respecto, el Jefe de Estado dijo que Llaryora, en lugar de adaptarse a fiestas y otras actividades, decidió aumentar la tarifa del pueblo a un nivel muy superior al subsidio equivalente y culpar al gobierno nacional, eso es mentira. Con la misma opinión, el presidente enfatizó que una situación similar ocurre en el resto de las provincias. De inmediato, los dirigentes del oficialismo cordobés salieron a responder al presidente y apoyar al gobernador.
El alcalde de la capital provincial, Daniel Paserinni, se pronunció en las redes sociales Por su parte, la vicegobernadora Myrian Prunotto afirmó de igual manera que Córdoba llevaba sus cuentas en orden y enfatizó que el Presidente volvió a equivocarse al hablar de Córdoba. Mientras tanto, los legisladores nacionales de la provincia también expresaron su apoyo a Llaryora. Por ejemplo, la senadora Alejandra Vigo publicó: Una vez más somos objeto de un ataque innecesario a nuestro gobernador, porque defiende la producción y el empleo, en una provincia con superávit financiero.
El Presidente debe ser moderado con el cargo que ocupa y reorientar su estilo de gestión hacia el diálogo y el federalismo. No podemos pretender cerrar figuras nacionales dividiendo las provincias, añadió Vigo, como aseveró a sus ministros. Finalmente, la federación de Córdoba, que agrupa a los representantes nacionales de Hacemos por Córdoba, expresó su rechazo a las declaraciones de Milei.
