Madres y padres acudieron al penal para saber si sus hijos estaban vivos o muertos pero solo vieron nuevos traslados. El panorama en el exterior del Penal Nacional La Victoria, en el municipio de Santo Domingo Norte, continúa siendo dramático y desgarrador desde que hace una semana se produjo un incendio que dejó 13 muertos y aún se desconoce la cifra estadística. de personas con condiciones de salud comprometidas.
La escena sigue siendo triste y para los vendedores de los alrededores, la gente llega a cualquier hora, especialmente en la mañana, llorando porque no saben que el estado de su propiedad se vuelve normal. , un familiar está en prisión. Sólo quiero saber más sobre mi hijo.
Necesito saber si está vivo o murió en el incendio. Si ese es el caso, aceptaré la voluntad de Dios porque no me queda otra opción, pero necesito saberlo, dijo con evidente tristeza Carmen de la Cruz, quien denunció que las autoridades no consideraron su dolor y un poco, el falso Se le dio la información que tenía sobre su hijo para que la tomara. Según su testimonio, desde lo sucedido ha aparecido varias veces a buscar a su hijo, un hombre de 31 años, a quien entregó a las autoridades por malcriarlo y luego de buscarlo siguen varias listas y así lo han hecho.
No apareció, le aseguraron que estaba siendo atendido en un hospital de La Vega, donde acudió y recibió comentarios negativos. Para De la Cruz, la primera señal de alerta tras la tragedia fue no recibir otra llamada del niño, a quien consideraba una buena persona. No me llama y siempre me llama cada vez que le damos el teléfono y desde el incendio no ha vuelto a contactarme ni ha aparecido.
‘Mi hijo no es un niño malo, ni un delincuente. Fui yo quien lo trajo a casa porque estaba muy mal y quería que estudiara. Ahora no sé si está sano’, se lamentó pidiendo ayuda.
La autoridad competente proporciona información. Los prisioneros son trasladados Camiones cama muy largos, encajonados con verjas metálicas en la parte superior y con techo ovalado del mismo material, entregados por la Dirección General de Migraciones, entregados a las 12:00 horas de un día de luna totalmente repletos de personas escondidas sacadas de la caja de la Victoria. Los vehículos estaban custodiados por miembros de la policía nacional y militares, y al salir, los detenidos gritaban diversas preguntas para tratar de hacerse entender; Sin embargo, debido al caos, es casi imposible distinguir las respuestas, salvo repeticiones que no conocemos, para responder a la pregunta de dónde fueron tomadas.
Sin embargo, la Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales (DGSPC) reveló que a la fecha un total de 772 reclusos han sido trasladados a los centros Vista El Valle, en San Francisco de Macorís; El Pinito, La Vega; Anamuya, en Higüey; en Cucama, La Romana; en Elías Piña y en Haras Nacionales. Los familiares están insatisfechos. Los familiares que esperaban afuera del lugar para recibir información de sus familiares dijeron que cuando llegaron al lugar quedaron muy sorprendidos por este anuncio.
Según su testimonio, ni siquiera recibieron una notificación, pero cuando intentaron entregar alimentos y comidas a sus familiares que cumplían condena, recibieron junto con la notificación una negativa de los guardias, sin hacer distinción alguna en cuanto a lo que servirá. Él. Llévate a los prisioneros.
Son invasores, eso es lo que pasa. No te avisan con antelación, pero tampoco te dicen a dónde lo llevan, simplemente llegas y te enteras que se lo han llevado a él, a Rosanna Hernández, junto con un hermano que ha estado preso 8 años, de cada 10, ya triste. Asimismo, otros se quejaron del distanciamiento que se impondría tras los cambios, creyendo que podrían ser llevados incluso a provincias muy alejadas de ellos.
Tuvieron que trasladarlos, sí, pero el problema fue que a estas personas que vivían en la capital las trajeron a La Vega y eso complicó la tarea de la familia porque les llevó todo un día y dinero que no tenían para viajar. . .
Amado Arias, padre de un condenado a 10 años de prisión, se quejó de que todos los vegueños tenían que ser enviados allí, junto con todos los demás.