Participación Ciudadana afirmó ayer que el uso irregular de recursos públicos para apoyar al partido o bloque gobernante es un acto profundamente arraigado en la historia política de República Dominicana, que cada vez ha alcanzado un nivel de notoriedad durante el años del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y el actual gobierno. Dijo en un comunicado de prensa que los programas públicos se utilizaron deliberadamente para influir en los votantes, lo que sólo era evidente por el grado en que se intensificaron a medida que se acercaban las elecciones. Por ejemplo, sostuvo que en el rubro destinado a publicidad, impresión y encuadernación en 2021 se gastó un total de RD$3,621 millones, los cuales aumentaron a RD$6,375 millones en 2022 y RD$8,786 millones en 2022.
De todos los gastos en 2023, ese año, el 74% ocurrió en el segundo semestre del año. Cabe señalar que casi todo lo calculado en esta posición, o el 86%, corresponde a publicidad y propaganda. Dijo que este año el presupuesto incluyó RD8,163 millones para publicidad, impresión y encuadernación, de los cuales en los primeros 3 meses y 12 días se gastaron RD2,790 millones, especialmente en los meses 2 y marzo, donde se fortalecen.
Así, en la segunda mitad del año pasado, a medida que se acercaban las elecciones, se gastó casi tres veces más dinero que en la primera vez, y en lo que va de 2024, seis veces más que en el mismo período del año pasado, asegura el PC. Aseguró que la publicidad oficial muchas veces incluía, de manera encubierta o explícita, información sobre los supuestos logros del gobierno, lo que no era más que propaganda electoral, aun cuando las cifras utilizadas explícitamente tienden a exagerar los éxitos, exhibidas en las páginas de los periódicos y en los audios. espacio visual.
Medios y plataformas. No es que esto no se haya hecho en gobiernos anteriores, y a veces incluso más en términos relativos, pero lo que la gente espera es que las irregularidades se corrijan en lugar de ser copiadas del mismo o incluso peor PC establecido. Destacó que los datos presentados provienen de la ejecución del presupuesto del Gobierno Central, por lo tanto, de los fondos destinados para tal fin por instituciones autónomas, alcaldías, bancos estatales y fideicomisos públicos, incluyendo en muchos casos contratos de publicidad.
En otras palabras, el presupuesto asignado para este fin probablemente sea mucho mayor. Otra práctica histórica Dijo que otra práctica histórica que persiste es la explotación de diversos programas públicos con fines electorales, principalmente programas de bienestar social, a pesar de varios esfuerzos legales o regulatorios electorales. Sin embargo, es difícil sacar conclusiones basadas en las estadísticas disponibles, porque este uso se incluye en categorías clave de gasto que incluyen programas estatales legítimos, por ejemplo, inversiones públicas, programas sociales y subsidios gubernamentales, pero a menudo se utilizan como un medio para favorecer a los seguidores.
. o promover candidatos oficiales. De particular interés es la categoría asignada a ayudas y donaciones a individuos, que, aunque se refieren a programas legítimos de lucha contra la pobreza, a menudo se utilizan de forma selectiva para apoyar al gobierno de turno.
Allí se gastaron 52 mil millones de pesos el año pasado 2023 y 11,594 millones de pesos en el primer bimestre de este año, registrando un aumento del 20% respecto de enero a febrero de 2023.