El mundo está lleno de violencia y armas, como si todo el mundo se hubiera vuelto loco, dijo el tirador, Jarek Cintula, en un mensaje registrado para poner a trabajar sus antecedentes. Cintula, de 71 años, disparó a Fico varias veces el miércoles cuando salía de una reunión del Consejo de Ministros celebrada en la ciudad de Handlova, donde se cree que el atacante trabajó hace muchos años en una mina. También trabajaba como guardia de seguridad en una empresa de seguridad y tenía licencia de armas.
Más recientemente, se dedicó a la poesía, fue miembro de un grupo literario en su ciudad natal de Levice y participó activamente en la política. En 2016, al lanzar el Movimiento Antiviolencia, Cintula declaró que la democracia eslovaca estaba amenazada por la privatización de los bienes estatales tras la caída de la dictadura comunista y denunció que esos bienes cayeron en manos de oligarcas y ricos. Comprar activos estatales.
representar. Al diagnosticar el peligro que consideraba que amenazaba la democracia, llamó a la gente a salir nuevamente a las calles, llenando las plazas, mostrando fuerza pero no violencia. El periodista de investigación húngaro Szabolcs Panyi afirmó que el atacante de Fico estaba vinculado con Slovenskí Branci, un grupo paramilitar eslovaco prorruso.
Panyi es miembro de VSquare, un prestigioso centro de investigación periodística que denuncia activamente la influencia rusa y sus conexiones con gobiernos ultranacionalistas como el de Eslovaquia o Hungría. En una publicación de 2016 en la página de Facebook de Slovenskí Branci, se puede ver a Cintula participando en un evento de este grupo ya desaparecido, que simpatizaba con la política neonazi eslovaca Marian Kotleba, condenada a cuatro años de prisión en 2020. En este mensaje de Facebook, Cintula pide la existencia de milicias armadas para proteger a los europeos de la llegada de cientos de miles de inmigrantes.
El presunto agresor ha publicado dos libros, uno de los cuales trata sobre los ataques contra la comunidad gitana en Eslovaquia, tradicionalmente sometida a políticas discriminatorias y segregadas. DUHA, el club literario del que era miembro el atacante, emitió un comunicado en el que se distanciaron completamente del comportamiento, las opiniones y las acciones de Juraj Cintula y expresaron su indignación por su brutal acto. A pesar de estos vínculos con los movimientos nacionalista y prorruso de Cintula, algunos miembros del gobierno de Fico acusaron a la oposición liberal y proeuropea de ser responsable del ataque, porque provocó un debate político debido a sus críticas al gobierno.
Desde que regresó al cargo de primer ministro en octubre pasado, por tercera vez desde 2006, Fico y su gobierno de nacionalistas de izquierda y extrema derecha han abolido la fiscalía anticorrupción que investigaba a miembros de su partido y propuso su disolución. radio y televisión públicas, a las que acusó de ser insuficientemente patrióticas. De hecho, tras su arresto, Cintula justificó su ataque a Fico diciendo que no estaba de acuerdo con la política del gobierno y denunció sus ataques a RTVS.
Fico también puso fin a la ayuda militar de Eslovaquia a Ucrania para ayudarla a resistir una invasión rusa y apoyó un alto el fuego con Rusia, incluso a costa de pérdidas territoriales para Ucrania. También mantiene posiciones contra los inmigrantes, los periodistas y la Unión Europea, muy similares a las del primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán. Estas medidas provocaron protestas masivas contra el gobierno, alentadas por la oposición progresista y liberal.
