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El dinero para la educación y la policía no debe gastarse sino invertirse

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Debemos soportar el caos en el que se han convertido nuestras calles, que dan la sensación de que en lugar de humanos conduciendo estos motores y transporte público, son animales los que lo hacen.

Ya hemos hablado anteriormente del sesgo de confirmación, que muchos políticos y funcionarios han sufrido durante décadas como una pandemia infecciosa.
Construcción masiva; consulta a dos manos; pagos educativos inútiles destinados sólo a favorecer a unos pocos compañeros de clase; aumentar el salario sin esperar compensación alguna por ello; se requieren privilegios, pero la eficacia educativa y el comportamiento tanto de docentes como de estudiantes aún se evidencia en su ausencia.

Esto es lo mismo que estos que está pasando con la Policía Nacional; ensamblan y “entrenan” tigueraje, esperando que los uniformados cambien su comportamiento grosero, como viene sucediendo cuando los padres envían a sus hijos a academias militares, buscando un cambio en su comportamiento.
Pero, aquí, A medida que pasa el tiempo, tanto los costos como la modernización en busca de la eficiencia en la educación, solo se desarrolla la primera teoría, porque en comparación con las demás, ni siquiera ha comenzado a completarse, porque parece que todas las teorías sobre el tema se han estancado. abajo y el gran problema sólo se ve a través del embudo de medir los intereses económicos y personales de los empleados de políticos y “sindicalistas”.
Mira lo que está pasando ahora, los cursos de conducción de automóviles deberían impartirse en las aulas de secundaria. y colegios, con el objetivo de luchar por la excelencia en el conocimiento de las normas establecidas para poder conducir motores de vehículos, donde quizás, si así se estableciera, el uso de dispositivos de mejor simulación, hoy no seríamos así. Debemos soportar el caos en el que se han convertido nuestras calles, que dan la sensación de que en lugar de humanos conduciendo estos motores y transporte público, son animales los que lo hacen. Sin embargo, claramente esto no forma parte de la prioridad educativa nacional ni del famoso 4%, no alcanza con hacer este programa y menos con conseguir estos simuladores de conducción.
Eso pasa lo mismo con la comprensión de los valores nacionales, donde sólo en el llamado mes de la Patria, como famosa venta de los comerciantes en determinados días, la gente propone reducir un monto como si fuera un regalo, mientras que en realidad hace unos meses aumentaron más. que esta cantidad reducida, que en realidad es un cierto esfuerzo que se está haciendo -medios de comunicación-, para inculcar en los estudiantes los conceptos de banderas e himnos nacionales, y para defender los principios que defendieron quienes sacrificaron sus vidas, para que hoy podamos orgullosamente dicen que somos dominicanos.

Queremos vivir en paz, pero que opinan de eso: desobedientes, arrogantes, groseros, irresponsabilidad, acciones deshonestas, malos modales, soberbia, falta de respeto, ignorancia, falta de consideración y cuantas acciones incultas pueden aparecer y fácilmente se puede comparar la conducta del vecino tigueraje con la conducta de los integrantes del P.N. vemos todos los días en las calles, es decir, la educación en el terreno nos ensucia todos los días. Seguiremos con esto. ¡Sí, señor!

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