París arde

Esta no es la icónica novela de 1964 de Larry Collins y Dominique Lapierre, que relata las horas previas a que las fuerzas aliadas liberaran París durante la Segunda Guerra Mundial. En esta ocasión, como parte del programa presentado en los Juegos Olímpicos de París 2024, titulado Festival, se mostró una parodia de la última comida de Jesús con sus apóstoles, esta vez reemplazada por la drag queen, una modelo. personas transgénero, personas desnudas, hombres besándose y otros comportamientos antiestéticos. Si con esta cruda presentación quieren exponer al público los valores de libertad, igualdad y fraternidad, agregando sororidad, igualdad e inclusión, entonces han perdido el concepto y significado de libertad, porque es un acto de voluntad. que tiene como objeto y fin, por otro lado, el liberalismo hace lo que contradice los principios morales de la hermandad, porque, desde el punto de vista conceptual, apunta a la dignidad humana, un estándar superior de igualdad, como así se pretende. para garantizar que no haya manifestaciones de degradación. Se trata simplemente de deconstruir la sociedad atacando a la familia, la educación y la cultura, burlándose de las enseñanzas religiosas. París arde, porque se ha promovido un ataque frontal contra el cristianismo y todos sus representantes, pero el valor infinito de la Eucaristía nos une a la intimidad con Cristo, que es fuente de toda gracia y a quien nadie puede resistir. él.