El presidente Luis Abinader estima que los flujos de inversión extranjera directa (IED) hacia el sector eléctrico deben alcanzar los 5,4 mil millones de dólares para lograr las siguientes metas.
Primero, una transformación más profunda en la producción, el transporte y la distribución; segundo, crear almacenamiento en frío para 2027 y el exceso de energía permitirá la expansión de cables submarinos para vender electricidad a Puerto Rico y tercero, lograr un 30% de energía renovable para 2030.
Las metas a nuestro alcance para los próximos años mencionado. Estoy seguro que los inversionistas extranjeros solo están esperando participar en la reforma sectorial que el gobierno está preparando y que se convierta en ley, para comenzar a inyectar capital a este sector.
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Como dijo el presidente Abinader durante la conferencia sobre inversión en infraestructura en América Latina y el Caribe, organizada por el Banco El Fondo de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) y la Junta del Tesoro organizan Ya tenemos un gobierno que sea favorable a la empresa privada, el empleo, el crecimiento y la innovación, reconociendo la estrecha conexión que existe entre la estabilidad política y la libertad individual, que sólo prospera en un sistema democrático como el nuestro.
Reforma del sector energético es una parte integral de una serie de reformas en curso, que tienen como objetivos generales y específicos la desregulación y los mercados libres, mejorando la calidad de los servicios públicos, fortaleciendo las instituciones y haciendo que el poder judicial sea más eficiente. independiente.
Tener un gobierno que apoye la empresa privada, el empleo, el crecimiento y la innovación explica; Primero, el flujo de capital de inversión extranjera directa que recibe este país cada año es creciente, alcanzando los 4.389,9 millones de dólares, equivalente al 3,6% del PIB para 2023; en segundo lugar, este es el nivel más alto desde 2010, cuando el Banco Central comenzó a calcular.
En tercer lugar, con esta cantidad, el déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos se puede compensar fácilmente, aumentando a 4.376,3 millones de dólares; y cuarto, la mayoría de estas inversiones son inversiones nuevas y el resto son ganancias empresariales reinvertidas. Todos estos logros son una medida de la confianza de los inversores extranjeros en las políticas fiscales y monetarias adoptadas por el gobierno y el Banco Central.
Fin nota Esto es reiterando lo que el FMI defiende en sus informes (por ejemplo, , de 2021 a 2023), que los déficits presupuestarios generados por la cuenta corriente son sostenibles, con entradas promedio de IED que alcanzan los 4.895,3 millones de dólares estadounidenses (2021-2023) y el déficit promedio que puede financiarse fácilmente con la cuenta corriente anual asciende a 4.536,8 millones. Dólares estadounidenses.
El capital también beneficia a diferentes sectores de la economía: el turismo recibe el 27,5%, seguido de la energía con el 24,2%, luego el sector inmobiliario con el 14,4%, el comercio y la industria el 13,8%, las finanzas el 11% y minería 10.2%.
Por países, Estados Unidos lidera la inversión extranjera en nuestro país con un 36,7%, seguido de España con una importante brecha de 10.7%, México 10.5% y Canadá 8.9%. una asignación que muestra el papel de Estados Unidos como inversor en primer lugar, primera economía del mundo, seguido de China, según los rankings del FMI y el Banco Mundial.
Los inversores extranjeros lo saben muy bien. bien y conceden gran importancia al hecho de que, con medidas financieras y monetarias prudentes, el Gobierno y el Banco Central tienen el principio de no permitir que las familias y las empresas privadas quiebren debido a shocks inesperados del exterior.
La mejor evidencia de esto son las acciones tomadas durante la crisis del coronavirus, las medidas tomadas han ayudado a evitar quiebras, fuga de capitales y fuertes depreciaciones, a diferencia de lo que sucedió en algunos países de la región.
