Ángel Lajara Concepción (Yeyé), además de poeta, también es artista al pie del teatro, una criatura donde convive la actuación, la puesta en escena y la vida, y quién sabe ya sea que ese andamio o la gloria se encuentre en el escenario o en la sala de ensayo.
Independientemente de todas las condiciones y circunstancias, en este ambiente, respira aunque se vuelva tan duro, difícil de respirar. Su más reciente apuesta teatral: “Cuentos crueles en blanco y negro”, adaptación de un libro de cuentos (Cuentos crueles de Nueva York y otras latitudes), cuyo autor firma el nombre a continuación, es una prueba de que va hacia arriba, hecho.
Vi cómo abordó este proyecto: desafiante, con el mismo sentimiento épico, una amenaza terrible para la salud y circunstancias siempre desfavorables para el teatro: dinero, hacer como siempre, difícil, algo bueno.
Realizó ambos papeles de manera brillante, por eso tenía una obra de teatro y actores sobre sus hombros. Aquí y allá, con el mismo entusiasmo, destilando y dejando huella con que creía en el teatro y que su creencia en este arte era tan profunda, era casi fe, por eso se exhibieron copias de la obra en la capital, San Francisco. . , y próximamente lo hará en Santiago. Hablamos con él y aquí están los resultados.
P. ¿Cuál fue tu experiencia adaptando el libro Cruel Tales from NY and Other Latitudes y llevándolo a los cines, y ahora Cruel Tales en blanco y negro?
R . Sorpréndete de las correspondencias y similitudes que existen entre los relatos teatrales y literarios.
R. Las historias, situaciones y personajes rezuman dramatismo.
P. ¿Cómo es la acogida del público de este nuevo trabajo que presentas?
R. Sorprendido y feliz.
P. ¿Qué dificultades surgen al iniciar la producción de una adaptación teatral y luego prepararse para el montaje?
A. Existen diferencias entre las etapas de la escritura. La dificultad radica en mantener la distinción.
P. ¿Qué público es más receptivo a la obra porque la has presentado en diferentes espacios?
A. No hay diferencia, con algún matiz el público responderá a estímulos comunes.
P. ¿Qué te llama la atención sobre la crueldad? ¿Es cruel el mundo actual?
A. El mundo es cruel y gentil, como dice el personaje al comienzo de la obra. En nuestras cabezas duermen los hombres más crueles y gentiles.
P. ¿Cuál fue la acogida y opinión de los vinculados al teatro sobre Cuentos crueles en blanco y negro?
R. La acogida fue muy entusiasta y agradecida.
P. De una presentación a otra, ¿cómo se desarrolla o mejora el trabajo?
R. El trabajo evoluciona, se crea y se recrea dentro de cada función.
P. En su opinión, ¿qué se solucionó cuando se presentó el trabajo?
A. Continúe siempre mejorando la calidad de la actuación.
P. ¿Cuáles son las expectativas para que este trabajo se presente en otro lugar?
A. Presentarse en el extranjero es tan importante como presentarse en nuestro país, es importante demostrarlo.
P. ¿Qué hace que estas historias sean crueles?
A. En estas historias, las circunstancias alienantes que viven los personajes son crueles y reflejan las condiciones inhumanas en las que vive toda la humanidad.
P. ¿Te llama especialmente la atención la crueldad en un director de teatro?
A. El director se interesa por la condición humana en general, incluida la crueldad.
P. ¿Qué piensa Ángel Concepción sobre la banalidad del mal y, a través del teatro, qué podemos hacer para representarlo y comprenderlo?
R. La banalidad del mal se derrumba cuando la gente intenta mirarse en el espejo del teatro y descubre que en él viven la risa y la tragedia, las personas más amables y crueles. Entonces la herida se cierra y las personas pueden recuperar la integridad perdida. Es la función más alta de cualquier teatro.
Ficha informativa: La cruel historia de Nueva York y otras latitudes (Editora Búho, 2023), de Eloy Alberto Tejera, dirección y escritura: Ángel Concepción (Yeyé) , actores: Ximena Pessoa, Elías Díaz y Leonardo Herrera (Dako), sonido y utilería: Jochy Marmolejos y escenografía, de Leonardo Herrera.