Washington.- La Corte Suprema de Texas ha emitido una orden de último momento para detener la ejecución de «un hombre» autista que fue condenado a muerte por la muerte de su hija de dos años y a quien legisladores, abogados penalistas, médicos, ONG y particulares han criticado la intervención.
Robert Roberson se salvó de su ejecución prevista para la medianoche del jueves, pero aún no ha finalizado No está claro si será ejecutado otro día, ya que la batalla legal aún no ha terminado.
La orden de suspensión del tribunal más alto del estado de Texas llegó más de 60 minutos antes de lo previsto. ejecución de Roberson, un hombre de 57 años, que llevaba más de 20 años en el corredor de la muerte y que había seguido la iniciativa de un grupo de legisladores, ambos republicanos. y el Partido Demócrata, en el Congreso de Texas.
Este grupo, miembros del Comité de Justicia Penal de la Asamblea de Texas, pidió al tribunal que suspenda temporalmente la ejecución de Roberson y que pueda ser llamado a declarar, con vistas a reconsiderar la sentencia.
El juicio se llevará a cabo el próximo lunes, según la ONG Death Penalty Information Center.
CNN informó hoy que anteriormente, la iniciativa y «en unos días, se presentaron varias apelaciones fueron rechazados por los tribunales estatales, con la Junta de Indultos de Texas negando la solicitud de clemencia y la negativa de la Corte Suprema de Estados Unidos a intervenir.»
La abogada de Roberson, Gretchen Sween, agradeció al grupo de «valientes legisladores bipartidistas de Texas » para la decisión de ‘analizar los hechos en el caso de Robert’ ningún tribunal lo ha examinado todavía.’
La condena se basó en un diagnóstico médico, que el abogado del condenado a muerte dijo que cree que esto es erróneo dados los nuevos hallazgos científicos de que la hija de Roberson, Nikki Curtis, murió de «síndrome del bebé sacudido», uno de los que pedían la conmutación de la pena de muerte de Roberson dijo recientemente: «Lo sorprendente del caso de Robert es que no hubo ningún delito en absoluto. En la mayoría de los casos de pena de muerte hay un asesinato y alguien lo cometió, pero en el caso de Robert no hubo ningún delito y estábamos a punto de matar a alguien por ello en Texas. Es muy escandaloso. basado en tres defectos graves.
El primero fue cuando su hija Nikki, de 2 años, fue llevada al hospital en coma en febrero de 2002, el personal médico concluyó que la niña había sido sacudida violentamente. sin consultar su historial médico.
Los defensores de Roberson afirman que después de este error inicial, los agentes de policía y los médicos no investigaron más a fondo y, como resultado, ignoraron síntomas graves, incluido el hecho de que la niña tenía fiebre de más de 40 grados justo antes de perder el conocimiento, tenía neumonía no diagnosticada y le habían administrado medicamentos considerados potencialmente mortales
Error tres, según la denuncia, los detectives. y el personal médico que entró en contacto con Roberson no sabía que tenía autismo (le diagnosticaron en 2018) e interpretó su comportamiento sin emociones como la postura de un asesino sádico
En lo que va de año, ha habido. Ha habido 5 muertes Según el sitio web deathpenalty.org, miles de prisioneros han sido ejecutados en Texas, un número similar al de Alabama, mientras que Oklahoma y Missouri ejecutaron a tres personas cada uno, y Utah y Florida ejecutaron a una cada uno.
