El Ejército ha bombardeado a Siria con más de 300 misiles desde la caída del régimen de Bashar Al Assad, quien huyó a Rusia junto a su familia con la condición de asilo político.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos reporta que Israel ha lanzado ataques aéreos desde este martes.
El Ejército israelí alega que con los bombardeos se busca eliminar “armas estratégicas” en Siria.
La incursión se produce en las zonas de Ain Al Tina y Ain Al Alika, cerca de Hadar y ubicadas a 25 kilómetros de la capital Damasco.
Israel procura apoderarse en Siria de misiles tierra-aire, sistemas anti-aéreos, misiles de cruceros y proyectiles tierra-aire, como una forma de evitar que pudieran caer manos de los grupos rebeldes que ahora controlan el país y derrocaron al dictador sirio.
El ejército israelí tomó control el fin de semana de una zona de contención desmilitarizada en Siria creada como parte de un alto el fuego de 1974 entre los países. Afirmó que la medida era temporal y tenía como objetivo asegurar su frontera.
Sin embargo, la incursión provocó condenas, con críticos que acusan a Israel de violar el alto el fuego y posiblemente de aprovechar el caos en Siria para una apropiación de tierras. Israel aún controla los Altos del Golán que capturó de Siria durante la guerra de Oriente Medio de 1967 y posteriormente anexó: una maniobra no reconocida por la mayoría de la comunidad internacional.
