ESPACIO DE ENCUENTRO. Lejos de la censura y represión de Beijing, los jóvenes chinos se reúnen en librerías, cafés y foros para debatir temas considerados peligrosos en su país. / EL PAÍS.
Poder hablar públicamente sobre feminismo, política y otros temas de interés social es algo normal en Argentina. Usuarios de todas las edades utilizan las redes sociales para cuestionar o defender hechos o expresar opiniones durante protestas y manifestaciones callejeras. Pero en China las cosas son diferentes. Recientemente, el periódico español El País reveló la existencia de una comunidad de jóvenes chinos en Japón, que a menudo se reúnen en espacios inusuales como librerías y cafés para debatir sobre la opinión pública y hablar sobre temas sobre los cuales el debate público sería impensable en su país de nacimiento. .
Agregar Comentario