Ulises Joaquín recoge los frutos de su trabajo: Doy gracias a Dios porque todo me va bien

Joaquín ha sido una de las piezas claves del bullpen del bicampeón, recientemente se ha convertido en la mayor fortaleza del club a lo largo de las temporadas
Ahora que ha llegado la luz que acompaña al éxito, Ulises Joaquín no olvida el arduo trabajo que ha realizado y las personas que lo han acompañado lo acompañan en estos. El momento de descanso es tu vida. carrera.

«Ha sido una temporada de orgullo para mí. He trabajado duro para conseguir estas oportunidades. Doy gracias a Dios porque todo me va bien. Tuve algunas lesiones y estuve muy cerca de «Estoy perdiendo mi carrera», dijo emocionado Joaquín mientras se acercaba a la rueda de prensa posterior a la victoria de Tigres del Licey por 7-6 sobre Leones de Esído en el partido del lunes en el estadio. Quisqueya Juan Marichal.

En el entretiempo Luego de un intento descontrolado que dejó al Elegido correr a tercera base y ganar en primera, Joaquín llegó al bate salvando al cerrador Jean Carlos Mejía y retirando a Junior Lake con bola a segunda. para registrar su primer salvamento en un juego de Round Robin.

«Siempre salgo a dar lo mejor de mí en el campo, para Escudo de compañeros de equipo. Estamos aquí para ayudarnos unos a otros, para apoyarnos unos a otros en todo lo que podamos. JC es un gran lanzador, las cosas no le salieron bien hoy, pero por eso estamos aquí», agregó.

Joaquín es uno de los débiles. El bicampeón del bullpen ha sido La mayor fortaleza del club en las últimas temporadas, en la serie de temporada regular fue quinto en entradas (20.2), segundo cinco en WHIP (20.2) y séptimo. en entradas porcentaje de carreras limpias (0.87) entre los relevistas de la Liga Dominicana.

«Mi mentalidad es lanzar strikes si Lake hace contacto con uno. La pelota cae al suelo o vuela así. No salí a retirar a nadie, salí a tirar”, agregó Joaquín, quien ingresó a las filas de Tigres el 8 de marzo de 2019 proveniente de Águilas Cibaeñas, en reemplazo de su compatriota José Domínguez
Mostrando su máximo. lado humano, el lanzador rápido de brazo derecho estuvo al borde de las lágrimas en varias ocasiones expresando que estaba preparado para estos momentos después pasando por un proceso difícil. en cuya lesión lo puso en riesgo de costarle su carrera.

Envió su agradecimiento a la directiva del Licey, al entrenador Gilbert Gómez y al entrenador lanzador Rafael Chaves «que tuvieron la osadía de confiar en mí», como así como por el club deportivo José Álvarez, director médico, porque «me ayudó a fortalecer los hombros
«Familia». Mi familia siempre está ahí en los buenos y en los malos, ellos son los que te apoyan cuando estás abajo, nunca se dan por vencidos y ahora vemos los resultados de eso. Tengo hijos que me siguen y hago lo mejor que puedo para dejarlo. que sepan qué clase de persona es su padre», dijo emocionado Joaquín.