Bolsonaro acompañó a su esposa, Michelle Bolsonaro, al aeropuerto de Brasilia, donde partió hacia Estados Unidos. Unidos asistirá a la investidura del expresidente brasileño Jair Bolsonaro lamentó este sábado la prohibición de viajar a Estados Unidos para asistir a la investidura del presidente electo estadounidense Donald Trump, al punto que lloró en el estadio. volar y denunciarse como un «prisionero político». Bolsonaro acompañó a su esposa, Michelle Bolsonaro, al aeropuerto de Brasilia, donde ella partió hacia Estados Unidos para asistir al evento. El juez del Supremo Tribunal Federal, Alexandre de Moraes, revocó el pasaporte de Bolsonaro en febrero como parte de una investigación sobre su participación en el intento de golpe. Situación al 8 de enero de 2023. Bolsonaro solicitó viajar a Washington para asistir a la toma de posesión, pero la solicitud fue denegada por considerar que se trataba solo de un «interés personal».
«Por supuesto. Es Qué bueno que estoy allí. El presidente Trump tenía muchas ganas de hacerlo porque me invitó. «Estoy triste, conmocionado, pero me enfrento a una persecución. «Es un gran acto político de una sola persona», dijo Bolsonaro, según El periódico O Globo.
Bolsonaro insistió en que era un «preso político» y se refirió a especulaciones de que podría usar un brazalete electrónico en el tobillo para monitoreo, lo que sería «humillante».
«Soy un preso político aunque no lleve tobillera electrónica. Espero que no quieras humillarme con una pulsera electrónica. Qué vergüenza. Quiero ir con mi esposa, pero mi hijo Eduardo y su esposa irán con ella. Quiero estar allí. «He concertado reuniones con jefes de Estado a través de Eduardo Bolsonaro, pero lamentablemente no podré asistir», explicó.
El expresidente brasileño destacó que la invitación vino del propio Trump y que » Me invitó porque estaba convencido de que podía contribuir a la democracia en Brasil.
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