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Santo Domingo.- Un especie de “toque de queda” pareció sentirse en la Capital durante el fin de semana, donde una gran parte de la gente eligió pasar el asueto de la Semana Santa en sus hogares, en recogimiento, sobre todo en la parte alta de la ciudad.
La mayoría argumentó que la tragedia ocurrida en la emblemática discoteca Jet Set, les había quitado las ganas de celebrar, otros mencionaron que acataron el llamado hecho por las autoridades a cuidar la vida, así como también un grupo alegó que no tenía dinero para ir a playas o al interior del país a ver a familiares y amigos.
A diferencia de otros días, las calles se veían vacías, con un flujo de vehículos casi inexistente, lo que a su vez evidenció la falta de limpieza urbana que presentan algunas vías, donde los desperdicios permanecían en las calzadas y aceras, creando un ambiente de putrefacción.
“Nosotros no salimos, la situación está muy difícil, se gasta mucho, también esas muertes ocurridas, el ánimo no estaba para eso, mis dos hijos y yo la pasamos tranquilos”, comentó María Tolentino en la calle Francisco Núñez Fabián de Villa Consuelo.
En el mismo lugar Gorkis del Carmen dijo que fue un fin de semana muy tranquilo, donde a diferencia de otros años no hubo piscina, cero ruido ni bebidas alcohólicas.
“Obedecimos el llamado del Gobierno, estos días son realmente para reflexionar, hubo demasiados muertos, hace mucho tiempo que no pasábamos una Semana Santa así”, externó Gorkis en la calle Oviedo.
En la calle La Guardia, Eduardo Luciano y Esther García mencionaron que prefirieron mantenerse en “un perfil bajo”, ya que la mayor parte de la gente perdió algún familiar o amigo cercano en la tragedia”.
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