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El Ministro de Educación afirma estar afrontando con seriedad escuelas cerradas, aunque discretamente

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Señaló que su prioridad es no hacerse de la vista gorda y actuar con transparencia, responsabilidad y con sentido de urgencia, “porque, al igual que para toda la sociedad dominicana, para mí, la educación es primordial”.

El ministro de Educación, Luis Miguel de Camps, declaró que la educación es una causa común que une a todos, como el Estado, los medios de comunicación y la ciudadanía.

De Camps indicó en una carta dirigida a Miguel Franjul, director de Listín Diario, que se están abordando con responsabilidad los casos de obras paralizadas, metas pendientes y cambios estructurales urgentes.

De Camps expresó que desde que asumió este cargo, ha recorrido todo el país acompañado de su equipo, con el objetivo principal de escuchar a las comunidades educativas, especialmente a los estudiantes y sus familias.

De Camps detalló que durante estos recorridos visitó sectores que “muchas veces no son tomados en cuenta por el sistema” y ante esto, afirmó que se han constatado grandes desafíos acumulados durante años.

Junto con la Dirección de Infraestructura Escolar, se realizó un levantamiento con información técnica nacional que les permite dimensionar con claridad las condiciones de infraestructura y los compromisos pendientes del Ministerio.

Sobre esta base, el funcionario explicó que se está diseñando un plan de ejecución riguroso y disciplinado que permitirá acelerar el avance del sistema educativo y que será comunicado oportunamente a todo el país.

De manera preventiva, el ministro comunicó que se instruyó tomar las medidas de protección necesarias.

“Hemos priorizado el trabajo serio y silencioso, mi dedicación es total. Trabajo cada día con la convicción de que producir resultados concretos y comunicarlos en el momento oportuno, es la única forma de concentrarnos y honrar la confianza que la comunidad educativa ha depositado en nosotros”, detalló el ministro.

Remarcó que su enfoque es no desviar la mirada y actuar con transparencia, responsabilidad y con sentido de urgencia, “porque, al igual que para toda la sociedad dominicana, para mí, la educación es lo primero”, enfatizó Luis Miguel de Camps.

Casos de escuelas paralizadas

A través de información proporcionada por la Dirección de Infraestructura Escolar, se pudo constatar que en República Dominicana existen alrededor de 415 edificaciones escolares con hasta 15 años sin finalizar, la mayoría iniciadas en el período 2012-2015 a través de diversos sorteos.

Estos centros educativos pendientes de finalizar están distribuidos en todo el país. Entre estos, en la provincia Santiago, se encuentran el Centro Educativo José Valentín Pérez en la comunidad La Noriega, el Centro Educativo de la Villa Olímpica en el barrio Francisco del Rosario Sánchez, la escuela Anhelita Suarez en El Aguacate y el Centro Educativo El Arroyo en Gurabo.

En la provincia La Vega, específicamente en el distrito municipal La Sabina del municipio Constanza, se encuentra el Centro Educativo Colonia Húngara, con 13 años en construcción.

Hace unas semanas, en la provincia Duarte, el nuevo plantel del Liceo Isidro Antonio Estévez, ubicado en la comunidad Blanco Arriba, cumplió 11 años desde que se inició su construcción.

Más de cuatro años suma el abandono de la construcción de la Escuela Enriquillo Pueblo Viejo, así como también la Escuela Campiña Tabara Abajo, Escuela Los Cartones, Escuelas Los Barrancones, Escuela José Francisco Peña Gómez, Ángel Fermín Noboa, Liceo Guayacanal, la ampliación del Liceo Villa Sagrado Corazón de Jesús, Escuela Inicial y Básica Nicolás Mañón, la San Martín de Porres y el remozamiento del Liceo Román B. Castro, en la provincia Azua.

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