Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
Nació en Madrid en 1998. Se graduó en Periodismo y Comunicación Audiovisual en la UC3M. Entró en el Diario AS como becario de Actualidad en 2020, aunque también ha trabajado en las secciones de Directos y Más Deporte, cubriendo algún evento de ajedrez. Desde agosto de 2022 escribe en Tikitakas.
Las puertas del restaurante de ‘First Dates’ se abrieron una vez más para recibir a personas en busca del amor. Una de las citas más memorables de la noche fue la de dos chicos: Gideon y Maxi. El primero, un militar estadounidense retirado; el segundo, un gestor financiero.
Ambos congeniaron desde el principio y, lo mejor, se gustaron a primera vista. “Es una persona normal, tiene unos ojos muy intensos”, destacó el militar retirado. Maxi sintió algo similar: “Con esa sonrisa, me tiene ganado”.
La conversación no pudo ser mejor. Poco a poco se dieron cuenta de que eran compatibles y no tardaron en hablar de temas más íntimos. Las fantasías sexuales, sobre las que el programa anima a hablar con diversos métodos, como rascas o espacios reservados, no tardaron en surgir.
Fue entonces, cuando la situación se estaba animando, cuando repentinamente hizo su aparición una de las gemelas que hacen de camareras en el programa. Un parón brusco para ambos. “Justo nos interrumpes en un momento crucial. Estábamos desnudos…”, dijo con ironía.
Ella, un poco avergonzada, no tuvo más remedio que desaparecer de la escena, para luego invitarlos al reservado a que terminaran lo que en su imaginación habían empezado unos minutos antes.
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