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Nueva York, 8 de mayo (EFE).- Nueva York se sumará en septiembre a otros estados que han vetado el uso de móviles en las escuelas públicas, una disposición que la gobernadora demócrata Kathy Hochul defendió este viernes en una misiva abierta como positiva para la concentración y el bienestar mental infantil.
“Los datos son claros. El 95 % de los adolescentes tienen teléfonos inteligentes. Reciben un promedio de 250 notificaciones diarias. No pueden enfocarse en nada más porque temen perderse algo”, señaló la demócrata en la carta.
La semana pasada, la legislatura estatal aprobó con apoyo de ambos partidos la prohibición de móviles en las escuelas del estado durante toda la jornada.
La medida, que también incluye los relojes inteligentes o auriculares, fue aprobada como parte del nuevo presupuesto, aunque contempla excepciones por motivos médicos, para quienes aprenden inglés o tienen discapacidades, y busca reducir las distracciones y el uso compulsivo de las redes sociales.
Cuando se aprobó la legislación, Hochul señaló que “los móviles han arrastrado a muchos de nuestros niños a lugares oscuros”.
Indicó en su carta de hoy que conversó con padres preocupados por la distracción de sus hijos debido a los móviles, pero muchos también se opusieron porque no quieren perder el contacto con ellos.
“Pasé el último año recorriendo Nueva York, hablando con todos, desde madres y padres, hasta maestros, estudiantes, directores y escuché lo mismo: los móviles están perjudicando a nuestros niños”, dijo.
Aseguró que entiende el temor legítimo de perder el contacto con los hijos en una emergencia, pero destacó que, según las autoridades, los móviles son una distracción en esas situaciones porque los niños se desvían de las instrucciones.
Según el New York Times, el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles se convirtió en el distrito escolar más grande de Estados Unidos en prohibir los teléfonos celulares el año pasado, y otros estados como Virginia, Ohio y Minnesota han tomado medidas similares.
“Se acabaron los memes en lugar de matemáticas. Ahora los niños podrán concentrarse, participar y volver a ser niños”, señaló Hochul, quien enfatizó que es “la última generación de estudiantes en Nueva York que crecerá con teléfonos en el aula”.
La ciudad de Nueva York aún no ha tomado esta iniciativa.
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