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Lo que debería ser un ambiente favorable para el aprendizaje y el crecimiento estudiantil, otra escuela específica demuestra lo opuesto. Hablamos del Liceo Santiago Hirujo Sosa, situado en el municipio Santo Domingo Norte.
En los últimos meses, LISTÍN DIARIO ha informado sobre una gran cantidad de estructuras escolares que en el país no están en condiciones adecuadas para la enseñanza.
Lo que debería ser un espacio propicio para el aprendizaje y el desarrollo estudiantil, otro plantel en particular evidencia lo contrario. Nos referimos al Liceo Santiago Hirujo Sosa, ubicado en el municipio Santo Domingo Norte.
El edificio fue construido sobre una cañada, que data de más de 50 años, y actualmente el centro educativo se encuentra en condiciones lamentables.
Sin embargo, mientras la situación empeora, el Ministerio de Educación (Minerd), el Distrito Escolar y otras autoridades competentes aún no han intervenido en la edificación.
Desde su fachada, oficinas y aulas, los signos de deterioro y hundimiento son evidentes, por lo que los estudiantes reciben clases de manera virtual.
El techo tiene goteras y partes colapsadas, y las columnas también están húmedas. Los pisos de toda la escuela están rotos debido a las lluvias que se han registrado en las últimas semanas, según los residentes.
Los salones, algunos aún inundados, muestran abandono. Sus paredes pintadas de blanco y azul, antes lisas, ahora están agrietadas, revelando el paso del tiempo y las condiciones adversas a las que han sido sometidas.
El sistema de drenaje en el Liceo Santiago Hirujo Sosa está obstruido y saturado de agua contaminada. Cuando se desborda, expulsa aguas residuales y basura a través de las rejillas, lo que agrava la obstrucción, reflejando la falta de mantenimiento y cuidado.
Además, las verjas y otros elementos de hierro del edificio han perdido su estabilidad, quedando doblados, situación que también ha sido cuestionada por los vecinos, quienes alegan que “el techo tiene un peso enorme”.
Durante una visita a la escuela, reporteros de este medio conversaron con la regidora Milagros Altagracia Parada, del Partido Revolucionario Moderno (PRM), quien expresó que suplica que las autoridades competentes intervengan en el centro educativo. “¡Esto es urgente! Estamos en temporada de lluvias y la escuela está sobre una cañada que con el tiempo debilita el suelo y lo hunde”, dijo la concejal.
En sintonía con lo expuesto por la regidora, se pronunció la presidenta de la Asociación de Padres, Madres, Tutores y Amigos de la Escuela (APMAE), Yesenia Feliz, quien indicó que la escuela en su totalidad no es segura.
“Los bordes del techo se caen”, dijo. Al mismo tiempo, se mostró consternada por un incidente ocurrido la semana pasada con una estudiante.
“La semana pasada, una estudiante estaba en el área cercana a la cocina del liceo y parte del techo se derrumbó. Se asustó mucho, pero gracias a Dios no le pasó nada”, contó la representante de los padres y tutores del liceo ubicado en Santo Domingo Norte.
Profesores imparten clases desde la escuela
Mientras los niños y adolescentes reciben clases virtuales en sus hogares, los profesores se arriesgan e imparten docencia desde sus dispositivos electrónicos, pero en la escuela.
Así lo afirmó la presidenta de la APMAE, al destacar que para no perder el año escolar, los profesores y el personal administrativo asisten al centro como de costumbre, pero manifestó que esto implica un riesgo.
Estas declaraciones también fueron respaldadas por la presidenta de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) en esa regional, Norma Segura, quien después de constatar el problema afirmó que las condiciones de la escuela son deplorables.
“La situación exige que ellos (alumnos y docentes) no estén aquí, y el Distrito Educativo debe encargarse de eso”, dijo la representante de los profesores en la zona.
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