Este contenido fue hecho con la asistencia de una inteligencia artificial y contó con la revisión del editor/periodista.
Este viernes por la mañana, en Montecristi, fue arrestado el padrastro acusado de violar y embarazar a una menor con discapacidad en junio pasado, en Mao, provincia Valverde.
Una fuente cercana a la investigación confirmó a LISTÍN DIARIO que David González, expareja de la madre de la menor, fue detenido tras estar prófugo durante casi un año.
El imputado había manifestado que se entregaría a las autoridades cuando se le practicara una prueba de paternidad (ADN) a la criatura y se obtuvieran los resultados. Sin embargo, los exámenes nunca se llevaron a cabo.
El 26 de julio de 2024, la Fiscalía de Valverde inició una investigación después de que la madre de la menor interpusiera una denuncia contra el hombre, quien en ese momento era su pareja. Él se encontraba en condición de prófugo.
Carina, nombre ficticio utilizado para identificar a la adolescente de 14 años con parálisis cerebral, habría sido violada y embarazada por su padrastro, según la denuncia.
La noticia de su embarazo se reveló luego de que la madre notara que la menstruación no se presentaba durante tres meses consecutivos, comenzando a preocuparse.
En ese tiempo, observaba cómo le crecían los senos y la barriga, lo que inicialmente atribuyó a un aumento de peso, sin sospechar que su hija había sido ultrajada.
Un día, mientras aseaba a la adolescente, descubrió que tenía una marca (una bolita) en el estómago, que pensó era un tumor. Al llevarla al médico, se enteró de la verdad.
La madre explicó que David (su pareja de entonces) había buscado un carro y llamado al hermano de ella porque él era el más interesado en saber qué le pasaba a la niña.
En ocasiones en que su otra hija de diez años estuvo internada, era su pareja (David) quien cuidaba a la de 14, porque María (nombre ficticio de la madre) aseguró que no tenía quien la ayudara.
“La llevamos al médico y la doctora me dijo: ‘¿Quién la cuida? ¿Quién está con ella siempre?’, yo le dije, yo, aunque a veces yo estaba con la otra interna, y ella me dijo: la niña está embarazada… A mí se me vino el mundo encima”.
Después de visitar a un ginecólogo, le comunicaron que el embarazo estaba avanzado, por lo que no se podía hacer nada. Explicó que cuando llegara el momento, se le realizaría una cesárea y, posteriormente, una prueba de ADN para determinar quién era el padre.
Agregar Comentario